Bolivia rechazó la reforma constitucional que impulsó el presidente izquierdista Evo Morales para postularse a un cuarto mandato (2020-2025), según el conteo oficial difundido por la presidencia del máximo tribunal electoral boliviano a 99.49 por ciento de los votos escrutados.
La presidenta del tribunal electoral, Katia Uriona, dijo en conferencia de prensa que tras “el consolidado a nivel nacional, a 99.49 de actas computadas, el resultado es de 51.31 por el No y el Sí con 48.69”, haciéndolo irreversible. Morales deberá dejar el poder en enero de 2020.
Se trata de la primera derrota electoral directa del mandatario desde su llegada al poder en 2006. El gobernante aspiraba hasta el último momento su esperanza de revertir el resultado, apoyado por el respaldo en las urnas de poblaciones campesinas, sus leales bastiones electorales y políticos.
Más de 6 millones de los 10 millones de habitantes de Bolivia fueron a las urnas el domingo para votar por una reforma constitucional sobre una tercera relección del mandatario, junto a su vicepresidente Álvaro García Linera.
De acuerdo a los resultados electorales oficiales, el rechazo al cambio de la Carta Magna se registró en seis de los nueve departamentos del país (Potosí, Tarija, Chuquisaca, Santa Cruz, Beni y Pando) y el apoyo en tres (La Paz, Oruro y Cochabamba).
La presidenta Uriona destacó el esfuerzo que hizo la entidad nacional para garantizar celeridad y precisión en el recuento de votos, que en el último tramo generó reclamos de oficialistas y opositores.