El delegado estatal de la Comisión Nacional del Agua (Conagua), César Lagarda Lagarda, informó que se detectaron metales pesados muy dañinos para la salud humana en el derrame de ácido súlfurico al río Sonora, producto de las actividades de la mina de Cananea. Además sostuvo que Grupo México, dueño de la mina de cobre, ocultó por uno o más días el incidente dado a conocer el viernes pasado.
Lagarda Lagarda informó en conferencia de prensa que encontraron arsénico, cadmio, aluminio, hierro, manganeso, níquel y cobre en concentraciones superiores a las permitidas en las aguas del Sonora, cerca del municipio de Baviácora, y se prevé que avance en las próximas horas a la presa El Molinito, en Hermosillo.
Según la empresa fue una falla estructural en una represa diseñada para el reuso del sulfato de cobre acidado, como le llaman ellos; en el pozo de contención instalaron un tubo que se botó y por ahí salieron los 40 millones de litros.
Lagarda Lagarda acusó que Grupo México ocultó el derrame de más de 40 millones de litros de solución de ácido sulfúrico, con metales pesados que habría ocurrido la noche del martes.
“La empresa ocultó deliberadamente la falla”, añadió el funcionario, quien dijo que habitantes de la comunidad Bacanuchi, municipio de Arizpe, a 80 kilómetros de la mina, avisaron de la emergencia a las alcaldías de Cananea y de Arizpe.
Confirmó también la mortandad de peces y previó que muera ganado. César Lagarda asimismo expuso que los efectos de metales pesados como cobre, cadmio y arsénico se manifiestan tiempo después de consumirlos.
Señaló que la emergencia continúa y Grupo México deberá pagar la remediación del daño, además de las multas que le impondrían la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente y la Conagua que serían hasta por 20 mil salarios mínimos.
Dijo ignorar por qué el viernes pasado la Unidad Estatal de Protección Civil minimizó los efectos del derrame y que aún no se sabe cuántos días tardará en superarse la emergencia en los municipios de San Felipe, Arizpe, Aconchi, Banamichi, Ures, Baviácora y Hermosillo.
Expuso que la Conagua y otras dependencias llevan agua en garrafones y embotellada, así como en pipas, a las comunidades afectadas, pero es una labor enorme y un reto tremendo que tal vez no se pueda cubrir por completo.
La CNDH inició una investigación por las presuntas violaciones a los derechos humanos de los habitantes de Sonora afectados por el derrame. Su presidente, Raúl Plascencia, ordenó que visitadores adjuntos recaben información y atiendan de inmediato las quejas de afectados, les den asesoría y los acompañen en las denuncias que presenten ante las autoridades involucradas.
Fuente: La Jornada