El nuevo hallazgo, que vincula a Argentina, Ecuador, Guatemala, México, Panamá, Perú, República Dominicana y Venezuela, se desprende de más de 13.000 documentos inéditos del ‘Departamento de Operaciones Estructuradas’, una división de Odebrecht creada con el propósito de manejar los sobornos que entregaba, que fueron obtenidos por la organización de noticias ecuatoriana La Posta, y luego compartidos con el ICIJ y 17 medios aliados en el continente americano, explica el propio consorcio.
Los archivos eran almacenados por la constructora brasileña en el sistema encriptado Drousys, una plataforma que registraba exclusivamente pagos ilícitos y era utilizado para ocultar sobornos o financiamiento electoral, según declaraciones del fiscal del caso Lava Jato, Orlando Martelo.
Durante tres meses, más de 50 periodistas en 10 países revisaron los documentos en torno a las transacciones del ‘Departamento de Operaciones Estructuradas’, cuya operación fue reconocida por Odebrecht, como parte de un acuerdo de culpabilidad con el Departamento de Justicia de EE.UU.: “funcionó efectivamente como un departamento de sobornos”, admitió la constructora.
Argentina
Fueron revelados pagos ilegales por casi 15.700.000 de dólares solo entre 2012 y 2014. Los gasoductos y la planta potabilizadora Paraná de las Palmas son las principales obras expuestas, con montos que oscilaban entre 18.000 y 500.000 dólares, girados siempre a través de las mismas sociedades ‘offshore’.
Además, figura la obra del soterramiento del ferrocarril Sarmiento, adjudicada durante el Gobierno de Cristina Fernández de Kirchner, con un pago al destinatario identificado como ‘De Niro’, de acuerdo a la filtración.
Dos exejecutivos de la constructora admitieron en Brasil que Odebrecht pagó sobornos por estas tres obras en Argentina, país donde la empresa es investigada junto a su entonces socio, Angelo Calcaterra, primo del presidente Mauricio Macri, y quien ha negado los supuestos sobornos.
Ecuador, México y Guatemala
En el caso de Ecuador, fueron develados correos electrónicos donde se discuten los supuestos pagos secretos realizados por un banco propiedad de operarios de Odebrecht a empresas fantasma y relacionados con un contrato de 2.000 millones de dólares para la construcción de una red de subterráneos en Quito. Los documentos no revelan quién recibió el dinero.
Ecuador también aparece vinculado en el caso de México, donde se encontró una transferencia encubierta por 13.000.000 de dólares del departamento de sobornos de Odebrecht a al menos tres intermediarias en los estados de Tamaulipas (norte) y Veracruz (este), vinculadas entre sí.
La firma de abogados fiscalistas asentada en Tampico, Tamaulipas, TTG Asociados, se comprometió a dar asesoría para preparar y negociar una oferta en la licitación del acueducto Represa La Esperanza-Refinería del Pacífico Eloy Alfaro, en la provincia de Manabí, Ecuador, obra que fue asignada meses después a Odebrecht.
También con PLC Servicios, empresa creada en Veracruz y que está ligada con una obra carretera en Guatemala, país en el que la constructora brasileña ha confesado el pago de 18.000.000 de dólares en sobornos para obtener un contrato de 384.000.000 de dólares para la construcción de una autopista que conectaría con México, la cual dejó inconclusa.
En la plataforma Drousys, además, hay registros de transferencias por más de 6.000.000 de dólares realizadas entre 2009 y 2011 a la empresa fantasma Blunderbuss Company de México, afincada en Poza Rica, Veracruz, y la cual el Servicio de Administración Tributaria (SAT) de México declaró como empresa inexistente.
En República Dominicana, Odebrecht habría pagado más de 39.000.000 de dólares vinculados con la construcción de la gigante central termoeléctrica de carbón de Punta Catalina, en la provincia de Peravia. Dos investigaciones oficiales previas sobre el proyecto informaron no haber encontrado hechos delictivos y no mencionan las supuestas coimas.
Perú
Fueron revelados también 17 pagos por más de 3.000.000 de dólares relacionados con el Gasoducto Sur Peruano, ubicado en el departamento de Moquegua.
La concesión del gasoducto fue adjudicada por más de 7.000 millones de dólares a la empresa brasileña, como postora única en junio de 2014 –durante el gobierno de Ollanta Humala–, licitación que originó dos investigaciones por los delitos de colusión y negociación incompatible.
Odebrecht admitió haber pagado coimas en cuatro obras realizadas en Perú. Sin embargo, en los archivos de la ‘División de Operaciones Estructuradas’ aparecen pagos referidos al gasoducto a destinatarios finales, ocultos bajo seudónimos.
Asimismo, más de 18.000.000 de dólares en 47 transacciones, hechas en 2014, aparecen vinculados a la red de subterráneos de la Ciudad de Panamá para la construcción de la Línea 1 del Metro.
En la ‘caja de sobornos’ de Odebrecht también se registran nueve transacciones, en el mismo año, por 674.984 dólares para la construcción de un túnel y una planta de tratamiento de aguas residuales de la ciudad de Panamá.
Para el diseño y construcción de la terminal sur del Aeropuerto Internacional de Tocumen, en la ciudad de Panamá, la constructora brasileña habría hecho 23 pagos por un monto de 7.274.909 de dólares.
Venezuela
Odebrecht, según los documentos, habría hecho 14 pagos ilegales por un monto de 34.144.889 de dólares relacionados con la construcción de una nueva línea del Metro de Caracas, Venezuela, con más de 12 kilómetros y 10 estaciones planeadas en la Línea 5 de la red de subterráneos.
También figuran siete transacciones en el año 2014 por 16.037.088 de dólares para la construcción del tren subterráneo de 42 kilómetros y 16 estaciones del Sistema de transporte Metro Caracas-Guarenas-Guatire.
Mientras que, presuntamente, para la construcción de la línea 2 del Metro con siete estaciones para conectar Los Teques con Caracas, la empresa habría entregado 4.678.446 de dólares en tres transacciones, también en 2014.
Dispuesta a cooperar
En un comunicado enviado al ICIJ, Odebrecht ratificó su compromiso de plena cooperación con las autoridades que investigan la corrupción vinculada a la empresa, y dijo que había entregado los documentos de Drousys a fiscales en EE.UU. y Brasil.
“Odebrecht seguirá haciendo todos los esfuerzos ante las autoridades competentes en un régimen de colaboración irrestricto”, informó en su declaración al consorcio de periodistas.
Según datos del Departamento de Justicia de EE.UU., entre 2001 y 2016, la empresa pagó más de 788.000.000 de dólares en concepto de sobornos, que le reportaron unos 3.300 millones de dólares en ganancias.
Ninguno de los pagos del ‘Departamento de Operaciones Estructuradas’ quedaba registrado en los libros contables de la empresa y, por lo tanto, eran ilegales, como
declararía ante los fiscales peruanos el extesorero de esa oficina, Fernando Migliaccio.
En diciembre de 2016, cuando la constructora brasilera reconoció el armado de un inmenso sistema de corrupción, que el Departamento de Justicia de Estados Unidos describió como “el mayor caso de sobornos extranjeros en la historia“, se desató una ola de escándalos políticos en toda Latinoamérica que este jueves se ha vuelto a abrir.
Fuente: RT