La poeta estadounidense Louise Glück ganó el jueves el Nobel de literatura “por su inconfundible voz poética, que con austera belleza hace universal la existencia individual”, reporta AP.
La neoyorquina Glück, de 77 años, que es profesora de inglés en la Universidad de Yale, hizo su debut en 1968 con “Firstborn” y “pronto fue aclamada como una de las poetas más destacadas en la literatura contemporánea estadounidense”, indicó la Academia del Nobel.
Su obra está “caracterizada por una búsqueda de claridad”, a menudo centrada en la infancia y la vida familiar, y la estrecha relación con padres y hermanos, señaló.
La Academia destacó su colección de 2006 “Averno”, que describió como “magistral” y “una interpretación visionaria del mito del descenso de Perséfone al infierno en el cautiverio de Hades, el dios de la muerte”.
El galardón, que incluye un premio de 10 millones de coronas (más de 1,1 millones de dólares), sigue a varios años de controversia y escándalo en torno al galardón literario más destacado del mundo.
El premio de 2018 se aplazó tras acusaciones de abusos sexuales en la Academia Sueca, el hermético organismo que elige a los ganadores, que desencadenaron un éxodo masivo de miembros.
Después de que la academia se reformara en un intento de recuperar la confianza de la Fundación Nobel, el año pasado se nombraron dos ganadores. La polaca Olga Tokarczuk recibió el premio de 2018 y el austriaco Peter Handke el de 2019.
El premio a Handke provocó un revuelo de protesta. Fue un firme defensor delos serbios en las guerras de los Balcanes en la década de 1990, y se le ha acusado de hacer apología de los crímenes de guerra serbios. Varios países, como Albania, Bosnia y Turquía, boicotearon la gala de premio como protesta, y un miembro del comité que nomina a los candidatos al premio de literatura renunció.
El Comité del Nobel entregó el lunes el premio de medicina al descubrimiento del virus causante de la hepatitis C. El martes se reconoció a varios físicos por sus avances en la comprensión de los misterios de los agujeros negros, mientras que el premio de química se concedió el miércoles a dos científicas responsables de una potente herramienta de edición genética.
Aún por anunciar están los ganadores en los campos de paz y economía de este año.