Para enfrentar la persistente inflación en productos alimenticios básicos, el presidente Andrés Manuel López Obrador sostuvo que es necesario apostar por la autosuficiencia alimentaria, pero, en el corto plazo, dijo, se podría analizar apertura en la importación de productos como huevo y carne.
Durante su conferencia, aseveró que la pandemia y la guerra generaron desajustes en las cadenas de producción de alimentos y esto ha pegado mucho en México por el incremento en insumos como los fertilizantes, “cuyo precio se incrementó mucho a nivel mundial por la guerra. Esto ha pasado con los alimentos básicos y el aumento en el precio del transporte maritimo, que se ha ido arriba 10 o 15 veces mas arriba”.
En paralelo, dijo, se requiere combatir distorsiones en la producción y venta como es el caso del coyotaje, que por un lado impide que los campesinos puedan obtener precios justos acorde con su esfuerzo y por otro lado, se incrementan los precios.
Señaló que esta crisis inflacionario ha dejado como lección básica la necesidad de que el país avance en la autosuficiencia alimentaria, citando especialmente el caso del arroz, en el cual se importa el 80 por ciento del consumo en México. En el caso del maíz,
“Nos falta resolver problemas en maiz. Somos autosuficientes en maíz blanco, pero no en maiz amarillo. Hay que Cuidar de que no entre maíz transgénico. Es una lucha permanente porque los que venden los químicos presionan para que se permita la siembra de maíz transgénico y eso no lo podemos permitir. En México tenemos muchas variedades de maíz nativo por eso no se debe optar por importar maíz transgénico. No sabemos los efectos que se ocasionan a la salud. No se trata de sólo lo mercantil, el comercio”.
Aseveró que en materia de frijol se alcanzó la autosuficiencia y se ha garantizado justicia para los productores mediante la instrumentación del precio de garantía que ha reducico el impacto del coyotaje en su distribución.
Sin embargo, insistió en que los monopolios de productores en México de carne de res y cerdo o de pollo ha impedido que hasta ahora se pueda importar estos productos desde Argentina, Uruguay o Brasil para que los consumidores puedan adquirirlos a precios mas justos.
“Todo eso se está terminando, hay inconformidad, pero espero que entiendan que la gente pueda comprar alimentos aprecios justos y que nadie abuse”., con modificaciones en los aranceles.
Sin embargo, afirmó que esta apertura no se puede hacer tabla rasa y no proteger a los productores nacionales. Citó el caso de la negociación del acuerdo de libre comercio con Ecuador porque ellos piden eliminar aranceles en la producción de plátano y camaron, lo cual ha impedido alcanzar un acuerdo definitivo.
Fuente: La Jornada