Policías municipales de Iguala, bajo las órdenes del grupo criminal Guerreros Unidos, ejecutaron a por lo menos 17 de los normalistas de Ayotzinapa desaparecidos, según la versión del Gobierno del Estado de Guerrero. Los estudiantes, sin embargo, rechazan la versión oficial.
El Procurador de Justicia de Guerrero, Iñaky Blanco, reveló ayer que dos integrantes de la banda y un policía preventivo confesaron haber asesinado a los estudiantes en un cerro de la localidad de Pueblo Viejo.
Justamente en ese sitio agreste, agentes de la Procuraduría de Justicia del estado y de la PGR localizaron el sábado varias fosas clandestinas en las cuales han encontrado hasta ahora 28 cadáveres, la mayoría calcinados.
Como parte de las investigaciones sobre la desaparición de 43 normalistas, las autoridades capturaron al policía municipal Honorio Antúnez Osorio, así a los presuntos narcotraficantes Martín Alejandro Macedo Barrera y Marco Antonio Ríos Velver.
Los tres confesaron haber participado de manera directa en el homicidio de los estudiantes.
“Estas personas fueron conscientes que trabajan para el grupo delincuencial denominado Guerreros Unidos, identificando a un total de 30 efectivos de la policía preventiva municipal como integrantes.
“Manifestaron haber participado directamente en el homicidio de estudiantes de Ayotzinapa (…) Lograron asegurar a 17 estudiantes a quienes trasladaron en un cerro de Pueblo Viejo en donde tienen fosas clandestinas y en donde dicen que los ultimaron”, describió el Procurador.
Los detenidos, de acuerdo con la versión oficial, dijeron que la orden de acudir hasta el sitio donde se encontraban los normalistas fue dada por el director de la Policía Municipal, Francisco Salgado Valladares, quien se encuentra prófugo.
Y que la orden de llevarlos a Pueblo Viejo y matarlos fue de un sujeto apodado “El Chucky”, líder del grupo criminal.
El Procurador de Justicia no descartó la posibilidad de que algunos de los restos hallados en las fosas pertenezcan a los estudiantes de Ayotzinapa.
Ante la pregunta de por qué fueron asesinados los estudiantes, el funcionario dijo que se sigue investigando.
Opera para cártel Policía de Iguala
El cártel Guerreros Unidos infiltró a la Policía Municipal de Iguala.
El Procurador de Guerrero, Iñaky Blanco, dijo ayer que 30 policías municipales y algunos de los mandos policiacos fueron señalados como integrantes del grupo delictivo.
Quien daba órdenes a los agentes policiacos de hacer labores de “halcones” y de asesinar a personas, indicó, es un individuo al que le apodan el “Chucky”, uno de los líderes de la banda.
En conferencia de prensa, Blanco expuso que derivado de las investigaciones se logró establecer la participación de policías municipales y un grupo de sicarios en los ataques a estudiantes de la Normal de Ayotzinapa y del equipo de futbol Avispones de Chilpancingo, en los que murieron seis personas.
“De actuaciones se advierte que en los homicidios de los estudiantes de la normal rural ‘Raúl Isidro Burgos’ de Ayotzinapa, de las dos personas que viajaban en el autobús del equipo de futbol Avispones de Chilpancingo y de una civil que transitaba por el lugar a bordo de un taxi participaron elementos de la Secretaría de Seguridad Pública de Iguala vinculados a la delincuencia organizada y sicarios a su servicio, particularmente del grupo conocido como los Guerreros Unidos”, externó en conferencia de prensa.
Relató que como parte de la investigación se detuvo al policía Honorio Antúnez, “El Patachín”, quien tenía vínculos con los delincuentes Martín Alejandro Macedo y Marco Antonio Díaz Velver, ambos integrantes del cártel.
El Procurador de Guerrero indicó que ya se libró órdenes de aprehensión contra Felipe Flores Velázquez, Secretario de Seguridad Pública y Protección Civil; el subsecretario Alejandro Tenescalco Mejía y el supervisor en turno Luis Francisco Díaz, por su probable responsabilidad de los delitos de homicidio calificado en agravio de las seis personas.
Recordó que otros 22 policías municipales que fueron detenidos el sábado 27 de septiembre, horas después de los hechos de violencia, ya están formalmente presos en el penal de Acapulco.
Por otra parte, manifestó que la Fiscalía promoverá un juicio para desaforar al Alcalde José Luis Abarca y pueda dar cuentas de su participación en los ataques.
Objetan versión
Estudiantes de la Escuela Normal de Ayotzinapa rechazan la versión del Gobierno de Guerrero, que asegura que sicarios del grupo criminal Guerreros Unidos participó en ataque a normalistas.
“Nosotros vimos que los policías se los llevaron. No puede ser posible que fueron los del crimen organizado. Nosotros no le hemos hecho nada al crimen organizado”, aseguró Uriel Alonso, vocero del comité estudiantil.
“Se están queriendo lavar las manos diciendo que fue el crimen organizado. Que no se hagan güeyes. Ellos perfectamente saben quiénes fueron”.
Fuente: Reforma