Miles de peces muertos aparecieron desde ayer a la orilla del estero El Infiernillo, en Mazatlán, Sinaloa, reportaron pescadores del lugar quienes denunciaron que en este lugar se concentran desechos y basura sin que nadie inspecciones la zona.
Según los testimonios, los peces agonizaron durante horas a la vista de todos, por lo que la alerta se difundió temprano entre pescadores y vecinos de la Colonia Libertad, los que viven cerca del puente Juárez. A todos les asombró ver capas plateadas como pequeñas lagunas que cubrían el agua turbia. En realidad eran los peces a flote.
Este es el sexto desastre ecológico que se registra en el país en menos de un mes. Ayer, la organización ecologista Greenpeace reclama que el Segundo Informe de Gobierno del Presidente Enrique Peña Nieto se rindió en un clima de desprecio y en medio de cuatro desastres ambientales.
“Los cuatro accidentes contaminaron diferentes ríos del país y causaron pérdidas millonarias por las afectaciones a actividades económicas como la agricultura y la ganadería. Dos derrames petroleros: uno en Cadereyta, Nuevo León y el otro en Huimanguillo, Tabasco; así como el vertido de agua con cianuro en el municipio El Oro, Durango y el derrame de 40 mil metros cúbicos de sustancias tóxicas en los ríos Sonora y Bacanuchi, provenientes de la mina Buenavista de Grupo México, que ha afectado al menos a 22 mil personas en siete municipios y considerado por la administración de Peña Nieto como ‘la peor catástrofe ambiental en la industria minera del país en los tiempos modernos’”.
A estos cuatro desastres se suman la mortandad de peces en la Laguna de Cajititlán, en Jalisco y ahora en el estero El Infiernillo.
Es un desastre ecológico
“Aquí la Jumapam [Junta Muncipal de Agua Potable y Alcantarillado de Mazatlán] descarga aguas sin tratar, ayer estuvieron dragando todo el día, las aguas de las alcantarillas también llegan aquí, es eso, los químicos y la suciedad los dejó sin oxígeno”, comentó al diario Noroeste uno de los dirigentes de pescadores.
“Aquí es una área de reproducción de muchas especies, si así está la orilla ¿cuántos millones de pescados murieron?, son toneladas”, indicó otro de los líderes de pescadores.
La mayoría de los peces muertos tenían entre tres y seis semanas de vida, según cálculo de los pescadores. “La Jumapam tiene muchas descargas, nosotros lo vemos cuando vamos a pescar carnada, pero nadie hace nada. Aquí todo el día es una pestilencia, porque los olores de las aguas negras son feos y lo peor es que esas aguas llegan aquí, caen en este lugar”, dijo un pescador.
La Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) en la zona sur señaló que no tenían información de la mortandad en el estero, y tampoco les correspondía atender, mientras que la Jumapam recorrió la zona unas horas después del aviso.
La Jumapam aceptó ayer que mantiene dos descargas de aguas sobre el estero El Infiernillo, pero no “graves”, y aseguró que en un recorrido de inspección, confirmó que los peces entraron con la marea. “Efectivamente hay una o dos descargas menores que se han estado arrojando al estero, pero que no es el motivo por el cual haya sucedido esto”, informó su oficina de Comunicación Social.
Fuente: Sin Embargo y Noroeste