El empresario juarense Federico de la Vega Mathews murió esta tarde a la edad de 84 años en un hospital de la ciudad de El Paso, Texas, a consecuencia de complicaciones de salud, reporta El Diario.
Quien era considerado uno de los empresarios más acaudalados de la frontera falleció luego de permanecer hospitalizado desde el viernes 11 de diciembre tras un desvanecimiento que lo dejó inconsciente en su casa en El Paso, donde vivía desde hace varios años, de acuerdo con información difundida por allegados a la familia De la Vega.
A Federico le sobreviven su esposa Guadalupe Arizpe y De la Maza, sus hijos Alejandra, Guadalupe y Artemio, así como seis nietos.
La familia aún no ha informado dónde se llevarán a cabo las honras fúnebres.
Federico de la Vega fue fundador del Grupo De la Vega, consorcio conformado por las empresas Almacenes Distribuidores de la Frontera, bajo el que operan las tiendas de conveniencia Del Río, Superette y Oasis; así como la Inmobiliaria De la Vega y Altec Purificación (Agua Alaska), Operadora Alpic (Dominos Pizza) y Gasolineras Petrol.
Datos oficiales indican que a través de sus empresas generaba más de tres mil empleos directos en la ciudad.
Durante más de 67 años la familia De la Vega operó en Ciudad Juárez la primera concesión de la Cervecería Cuauhtémoc, de Monterrey, para distribuir la cerveza Carta Blanca, licencia que vendió a Femsa.
Además de su labor empresarial que lo colocó como uno de los hombres de negocios con mayor poder económico de la región, Federico de la Vega se destacó por sus aportaciones para el desarrollo educativo, social, económico, deportivo y cultural en Ciudad Juárez.
Federico de la Vega nació el 1 de septiembre 1931, fue hijo único del matrimonio conformado por Artemio de la Vega Berdayes –originario de España– y Katheryn Mathews, informó la familia.
Estudió en el Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT), en Estados Unidos; y en el Instituto Tecnológico de Estudios Superiores de Monterrey (ITESM), en Monterrey, donde obtuvo el grado de ingeniero químico.
Durante su estancia en el ITESM conoció a Guadalupe Arizpe y De la Maza, con quien se casó y también ha destacado por su labor altruista como fundadora del la organización civil FEMAP, Salud y Desarrollo Comunitario de Cd. Juárez, A.C., así como por el impulso de programas comunitarios y el Hospital de la Familia.
En el terreno educativo fue ampliamente reconocido por establecer y apoyar diversas instituciones de todos los grados académicos, principalmente de educación superior, entre las que destaca la Universidad Autónoma de Ciudad Juárez (UACJ), de la que fue el primer presidente del patronato.
También fundó el Instituto Tecnológico Regional y el ITESM campus Juárez, éste último donde fungió como presidente del patronato por más de 25 años, durante los cuales apoyó en la creación de un Fondo de Becas para más del 70 por ciento de los estudiantes y el Fondo Reservado constituido por obras bibliográficas impresas que datan de inicios del siglo XVI al siglo XII.
Además gestionó la edificación de la Universidad Tecnológica Paso del Norte, única institución de educación superior en la zona poniente de la ciudad y recientemente la Escuela de Enfermería perteneciente al FEMAP, un modelo de institución a nivel nacional e internacional.
En materia de desarrollo económico, a Federico de la Vega se le reconoce como uno de los impulsores de la industria maquiladora de exportación en la ciudad en la década de los 60, junto con los empresarios juarenses Fernando Borreguero Allard, Jaime Bermúdez Cuarón y Alfonso Murguía, quienes hicieron las gestiones ante el Gobierno Federal para que emitiera el decreto que dio origen a este tipo de empresas.
Durante su período como presidente de Desarrollo Económico de Ciudad Juárez A.C. promovió las primeras muestras de insumos para esta industria y como presidente de la Cámara Nacional de Comercio (Canaco) en la ciudad fue uno de los principales promotores del artículo gancho para detonar la economía de la frontera y ser competitivos ante la actividad comercial de El Paso.
Fue presidente de la Comisión de Ciudades Fronterizas, México-Estados Unidos, presidente del Consejo de Vinculación del Sector Educativo con el Sector Industrial e impulsor del American Bank of Commerce de El Paso, Texas.
Su contribución en el ámbito deportivo también fue destacada, al apoyar el deporte amateur y profesional, al organizar torneos, habilitar espacios, aportar equipo y viáticos para deportistas que representaban a la ciudad, al estado y al país, lo que le valió ingresar al Salón de la Fama del Deporte juarense.
De manera directa impulsó a varios clubes profesionales en Ciudad Juárez, como el equipo de beisbol Indios, a los equipos de futbol Cobras y Tigres; mientras que recientemente respaldó a su hija Alejandra en la creación del equipo Futbol Club Juárez, mejor conocidos como Bravos.
En materia cultural, Federico de la Vega apoyó al Museo de Arte Moderno del INBA, financió la remodelación del Museo del Desierto de San Agustín y contribuyó a la restauración del Monumento a Benito Juárez.
Por su labor recibió varios premios y reconocimientos, entre los que destacan el que le dio en 1998 la Universidad Santa Lucía de El Paso, que le otorgó el grado de Doctor Honoris Causa, y el Premio Negocio Familiar del Año, que le concedió la Universidad de Texas en El Paso (UTEP), junto con su esposa.
En 2001 recibió el Premio Nacional Eugenio Garza Sada, otorgado por el ITESM; y en 2005 el Ayuntamiento de Ciudad Juárez le otorgó la Presea Fray García de San Francisco, por su contribución al desarrollo y progreso de esta frontera.
En mayo de 2013, el Patronato del ITESM campus Juárez honró a De la Vega Mathews por su trayectoria como presidente fundador y vitalicio de la institución, en un acto celebrado en El Paso, a donde se mudó en 2009 por la crisis de inseguridad en Juárez, aunque de manera frecuente visitaba su ciudad natal, donde mantuvo sus negocios y residencia.
Fuente: El Diario
