Tras convertirse en la primera persona en escalar el Everest por la cara norte y la cara sur en una misma temporada de escalada, el mexicano David Liaño se propone navegar en solitario alrededor del mundo en septiembre.
“Es una gran aventura. He hecho lo máximo en escalada y ahora quiero hacer lo máximo en navegación recorriendo el mundo en solitario”, dijo Liaño, tras regresar del Tibet a Nepal.
“No se puede ir más allá de navegar alrededor del mundo en solitario” , remarcó el deportista.
Liaño alcanzó los ocho mil 848 metros de altura del pico más alto del planeta el 11 de mayo, descendió la montaña, viajó en helicóptero a Katmandú, desde donde se trasladó por tierra a Tíbet y volvió a escalar el Everest el 19 de mayo.
El mexicano subió por primera vez el Everest en 2005, año en que completó la escalada de las “siete cumbres” , los siete picos más altos del mundo.
En 2008, repitió la escalada al Everest y subió también el Lhotse, que con ocho mil 516 metros es la cuarta montaña más alta del mundo.
Dos años más tarde se propuso escalar el Everest por la cara norte y la cara sur en una misma temporada de escalada, pero unos problemas del corazón se lo impidieron, aunque sí consiguió subir la cara sur.
En 2011 volvía a intentar la doble ascensión, pero “el tráfico” le obligo a regresar a 8.350 metros en la cara sur y en la norte abandonó por fuertes dolores de cabeza.
“Siempre me he impuesto grandes objetivos y el montañismo me permite imponerme grandes objetivos”, afirmó el consejero de inversiones de 33 años de la ciudad de Nuevo México.
Liaño y el sherpa Samden Bhote fueron los primeros en subir el Everest este año el 11 de mayo.
“Tuvimos la montaña para nosotros solos”, dijo Liaño.
El mexicano afirmó que se sintieron como Edmund Hillary y Tenzing Norgay, los primeros en escalar el Everest en 1953.
Precisamente el próximo 29 de este mes se cumple el 60 aniversario de esa primera escalada de Hillary y Tenzing a la montaña más alta del mundo.
Las cosas han cambiado desde entonces y cuando Liaño subió por la cara norte se encontró con bastante ‘tráfico’, pero los 20 escaladores que trataban de alcanzar la cima ese día le ayudaron ya que el mexicano se proponía realizar una doble ascensión.
“En la segunda ascensión estaba muy aclimatado y me quedé a 100 metros de la cima antes de las 3 de la mañana. Descansamos bajo una roca una hora para esperar la luz del día”, dijo el deportista.
Liaño, hombre de negocios, no necesita patrocinadores para hazañas deportivas.
Cuando alcanzó la cima por segunda vez, en lugar de mostrar carteles con marcas patrocinadoras, se hizo una foto con una imagen en la que aparecían su padre, su madre y su hermano.
“Llevo esta foto de mi familia conmigo. Es una forma de agradecimiento y de decirles que les llevo conmigo en espíritu”, dijo el escalador.
Sus padres siempre les han apoyado en su carrera de escalador, que comenzó a la edad de 13 años.
Liaño, con doble nacionalidad española y mexicana ya que su padre procede de España, no está casado, lo que le libera para emprender sus hazañas.
“Si estuviese casado no intentaría estos restos. Sería egoísta invertir tiempo y dinero y ponerme en peligro, ya que no soy un escalador profesional”, explicó Liaño.
El aventurero, además de montañero y navegante es piloto de parapente, ha corrido 14 maratones y participa en pruebas de triatlón.
Una semana antes de ir a Nepal para subir al Everest disputó el triatlón “Ironman” en Los Cabos, México, en el que nadó 3,8 kilómetros, pedaleó 180 kilómetros y corrió 42 kilómetros en el mismo día.
Ahora Liaño ya piensa en su próximo reto en el mar, un medio que conoce bien ya que el año pasado participó en una competición en solitario de 16 días entre San Francisco y Hawai.
La vuelta al mundo en solitario del mexicano comenzará en Acapulco en México, y le llevará entre siete y ocho meses recorrer las 26 mil millas náuticas de esta nueva aventura.
Fuente: EFE
