La cantante Melissa, hija de uno de las cabezas de Los Caballeros Templarios, respondió hoy con un video desde su cuenta de Instagram a la ola de críticas que se desataron por sus abiertos nexos con la organización criminal.
“Gracias a mis verdaderos amigos! Ay qe darle importancia a las cosas dependiendo qe quien vengan, de los qe ni conozco de verdad qe me pueden seguir dando publicidad! Gracias DLB! Blah Blah Blah, la gente habla mucho!!!”, escribió.
Y enseguida publicó el video, que lleva la música del tema “Me vale todo”, del grupo Maná.
“Esos que me andan buscando, les voy a dar una pista: mis soldados son guerreros que por mí darían la vida. No soy narcotraficante, soy jefe de una familia. Mi territorio es sagrado, fui elegido desde arriba”, dice la letra de una canción de Melissa Plancarte, “la Barbie grupera”.
La joven es hija de uno de los líderes de Los Caballeros Templarios: Enrique Plancarte Solis, “El Kikín” o “Kike”, por quien piden una recompensa de 10 millones de pesos. La canción habla claramente de la organización criminal. “En cualquier abecedario, efe es primero que zeta. Porque soy héroe y villano, me quieren y respetan. Yo soy puro Michoacán, no como otros que aparentan”, dice más adelante la misma canción que la hija de Plancarte entona en eventos públicos, de Morelia al Distrito Federal.
Melissa y su hermano Kike, “el príncipe de la banda”, presumían en redes sociales y en sus canciones los nexos con la banda criminal. Ayer que se reveló su relación con Los Templarios; se volvieron foco de atención. Pero no fue gracias a las autoridades federales, que desde el gobierno de Felipe Calderón Hinojosa y ahora con el de Enrique Peña Nieto aseguran estar en guerra contra los narcotraficantes. Fue por los grupos de autodefensa o policías comunitarias, que mantienen una batalla a nivel piso contra Los Caballeros Templarios.
Las imágenes y los videos de Melissa circularon intensamente por las redes sociales y fueron exhibidas como muestra de la total impunidad con la que los líderes del tráfico de drogas en México hacen vida social y pública.
El fin de semana pasado, grupos de autodefensas tomaron una de las mansiones de “Kike” Plancarte, dirigente de la organización criminal –junto a Servando Gómez Martínez, “La Tuta”, y el supuestamente abatido Nazario Moreno González, “El Chayo” o “El Más Loco”– que mantiene en tensión a Michoacán y otros estados de la República Mexicana.
Días después de que autodefensas tomaran la residencia, el gobierno federal anunció un acuerdo para blindar los estados colindantes con la entidad para contener la delincuencia. Tiendas de Hidalgo y Estado de México conocidas como Oxxo fueron atacadas la víspera, mientras que cuatro cuerpos fueron encontrados en los límites de Guanajuato y Michoacán.
Aunque el titular de la Secretaría de Gobernación (Segob), Miguel Ángel Osorio Chong, afirmó que están en alerta permanente en todos los estados para dar con los delincuentes, el vocero de los grupos de autodefensas, Estanislao Beltrán Torres, aseguró desde el domingo pasado que las principales cabecillas ya huyeron de Michoacán.
El líder comunitario dijo que tener información fidedigna de que Enrique Plancarte se encuentra en Puebla, mientras que Nazario Moreno se encontraría en San Luis Potosí, Tabasco o Guatemala.
Por su parte, Monte Alejandro Rubido, secretario técnico del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SNSP), informó que tras el despliegue de las fuerzas federales en la región de Tierra Caliente de Michoacán 59 presuntos integrantes de grupos delictivos que operan en la zona fueron detenidos.
En conferencia de prensa, detalló que este martes fueron aprehendidos cinco presuntos delincuentes, entre ellos Gustavo Adolfo Magaña Mosqueda, acusado de cometer extorsiones en Zamora; Yolanda Godínez Aguilar, señalada como informante en Apatzingán, además de Armando Patiño Valencia, acusado de secuestro y homicidio en Tancítaro. Mencionó que este día, el Gobernador Fausto Vallejo, acompañado por el comisionado Alfredo Castillo, encabezaron una reunión de evaluación y tareas a seguir con autoridades federales y estatales.
Fuente: Sin Embargo