Los sindicatos belgas movilizaron el miércoles a unos 100 mil trabajadores por segunda vez en un año para protestar por las regulaciones de libre mercado y austeridad que el gobierno de centroderecha ha promovido en su primer año en el cargo.
Y al igual que en noviembre, el final de la manifestación se vio empañado por la violencia cuando algunos centenares de personas apedrearon a la policía hasta que fueron rechazados con gases lacrimógenos y cañones hídricos.
La policía dijo que más de 80 mil personas se sumaron a la protesta del miércoles. Los sindicatos dijeron que fueron 100 mil, unos 20 mil menos que en las manifestaciones del año pasado.
Los tres principales sindicatos belgas participaron bajo una plataforma común por considerar que el gobierno del primer ministro Charles Michel promueve las grandes empresas en detrimento de los trabajadores.
Los sindicatos se quejan específicamente sobre la congelación del vínculo entre inflación y salarios, el aumento de la edad de retiro, cortes en los servicios sociales y medidas impositivas que consideran benefician injustamente a los empleadores.
Fuente: AP