Con la tarjeta de presentación de protectora de los derechos de las sexoservidoras, Alejandra Gil logró colarse hasta la residencia de oficial de Los Pinos para atestiguar el arranque del programa Seguros de Vida para Jefas de Familia, promovido por la Sedesol.
Bajo esta careta aprovechó el evento para fotografiarse con servidores públicos. Pero detrás de su Asociación en Pro Apoyo a Servidores (Aproase) se escondía una red de trata, de acuerdo con investigaciones de la procuraduría del DF.
La madame de Sullivan utilizó la fachada de la filantropía y la lucha por mejorar las condiciones de las sexoservidoras. Con este discurso, participó en debates contra la Ley de Trata de Personas en el Senado. Pero esta semana, quien dirigió esta asociación, fue arrestada por la Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal (PGJDF).
Según las investigaciones, Alejandra y su hijo, Omar Sayun, obtenían ganancias por los encuentros íntimos de mujeres que se prostituían en avenida Sullivan, delegación Cuauhtémoc.
En realidad, la supuesta defensora de las sexoservidoras vivía del dinero que cobraba a 40 mujeres, quienes ofrecían servicios sexuales en dicha calle, en el tramo que va de Circuito Interior al Monumento a la Madre. Los testimonios revelan que aquella mujer que se negaba a pagarle recibía una golpiza.
El 19 de agosto de 2013, El Universal publicó que una red de trata operaba en la delegación Cuauhtémoc, que incluía la zona de la que se había adueñado Alejandra Gil.
La organización Unidos contra la Trata dijo a este diario, en aquella ocasión, que Alejandra era un “madrota”.
Pero Alejandra se defendió y lo negó. Además, organizó un grupo de 60 sexoservidoras para bloquear el cruce de Paseo de la Reforma y avenida Bucareli en protesta por los señalamientos que hicieron las activistas Rosi Orozco y Madai Morales.
Gil dijo ser la vicepresidenta de la Red Mundial de Trabajo Sexual y activista de la Asociación en Pro Apoyo a Servidores, y aseguró que las mujeres que vestían de blanco, con tapabocas y lentes oscuros, no eran explotadas.
Meses después, tras una denuncia, personal de la PGJDF realizó un operativo en el que liberó a mujeres que se prostituían en Sullivan y gracias a sus declaraciones se logró detener a los presuntos explotadores.
La Procuraduría inició una investigación, la cual continúa sin que haya más detenidos. Según, Rosi Orozco, presidenta de la Comisión Unidos contra la Trata, AC, la organización de Alejandra Gil está compuesta por “muchas personas, ella era la cabeza en Sullivan, defendía a algunas madrotas e informaba para que sus competidores fueran quitados del lugar”. La madame de Sullivan está hoy a la espera de que la procuraduría la consigne.
Fuente: El Universal
