La expresidenta de Brasil, Dilma Rouseff, denunció que la derecha busca sacar a toda costa del ruedo político al ex mandatario brasileño Luiz Inacio Lula da Silva, a quien consideró un preso político, en un encuentro con la prensa durante el XXIV Encuentro Anual del Foro de Sao Paulo, que se celebra en esta capital.
“Ellos (la oligarquía brasileña) quieren que tengamos un plan B, que sería una alternativa para Lula, para que nosotros tengamos la certeza que sea inocente, y retiremos a Lula de la elección y por tanto, este momento es de ratificación de la candidatura de Lula, sobre todo cuando se cumplen 100 días de su detención ilegal que lo caracteriza como un preso político”, expresó Rouseff.
En opinión de la ex mandataria brasileña (2011-2016), Lula puede llegar a la presidencia de Brasil porque la población le ofrece casi el 40 por ciento de los votos.
“Sumando a todos los candidatos, no alcanzan ese por ciento, entonces las posibilidades reales, y conociendo la base de la democracia, la fuerza seria del voto popular”, enfatizó la dirigente política.
Precisó que existe una élite judicial, mediática y financiera que no quiere que Lula llegue de nuevo a la presidencia de Brasil.
“Este es un momento de tensión –subrayó Rouseff-, y solo sabremos lo que sucederá en las elecciones. Pero algo tiene que quedar claro en todo esto, y los medios de prensa brasileños pierden todos los días y piden para que tengamos un plan B”.
Lula da Silva se perfila como el candidato favorito de las próximas elecciones en el gigante suramericano, pero se encuentra detenido en la cárcel, bajo una controvertida acusación de corrupción, que ha provocado protestas y manifestaciones populares exigiendo la inmediata liberación del político brasileño.