En Francia, los productores de lavanda, jazmín y de perfumes se preparan para una guerra. La Comisión Europea quiere intervenir en la composición de las fragancias. ¿Bruselas tiene que proteger a los alérgicos de los perfumnes que provocan reacciones?
Robertet es el productor mundial de materias primas de perfumes, situado en Grasse, en el sur de Francia. Aquí los perfumistas defienden el sector mientras que la Comisión Europea quiere intervenir en la composición de los perfumes, especialmente en los que se fabrican con sustancias que producen alergias.
Sobre la mesa hay un informe científico de más de trescientas páginas que recomienda prohibir tres sustancias naturales potencialmente alergénicas y la limitación de otras que además de alergias producen irritaciones en la piel, entre otros efectos.
Esto supone que los perfumistas tendrán ensayar otras fórmulas y sustituir los ingredientes prohibidos por otros si quieren seguir conservando el mismo olor en sus perfumes.
En Grasse, la vida gira en torno a los perfumes y al gigante productor Robertet, fudado en 1850. Maneja una cifra de negocios de 400 millones de euros. Tiene 22 delegaciones repartidas por todo el mundo.
El informe de la Comisión ha presentado una lista de 179 sustancias alergénicas que recomienda etiquetar, reducir o eliminar. Esto puede suponer un coste de 100 millones de euros para que la industria francesa se adapte a las nuevas normas.
Fuente: euronews