Por Marta Lamas
¿Qué llevó al suicidio a Jacintha Saldanha? La enfermera que atendió inicialmente la llamada telefónica de dos locutores australianos, que se hicieron pasar por la reina Isabel II y el príncipe Carlos, se ahorcó tres días después. ¿Qué ocurrió durante ese lapso? Saldanha, de 46 años, solamente transfirió la llamada a la enfermera encargada de Catalina de Cambridge, ingresada al hospital King Edward VII de Londres por fuertes náuseas a consecuencia de su embarazo. ¿Acaso fue víctima de escarnio racista por no darse cuenta de que no era la voz de su majestad? Cuando se supo el engaño, uno de los comentarios más burlones fue que la voz de quien se había hecho pasar por la reina ni siquiera era parecida a la de Isabel II. ¿Qué impulsó a la enfermera de origen indio a quitarse la vida?
Tras conocerse la muerte de Saldanha, los portavoces de la familia real británica señalaron que no habían presentado ninguna queja al centro médico por haber divulgado la información sobre el estado de salud de Catalina. Por su parte, el hospital aseguró que la enfermera no había sido sancionada. Familiares y colegas del centro hospitalario han sido citados a declarar, mientras Scotland Yard investiga llamadas telefónicas y correos electrónicos.
La interpretación que manejan los medios de comunicación británicos es que la enfermera, que trabajaba desde 2008 en ese elegante hospital privado, sufrió un cuadro muy grave de estrés laboral y personal. Jacintha dejó tres cartas, escritas de su puño y letra, antes de suicidarse. Aunque todavía su contenido no ha salido a la luz, una persona cercana a su familia dijo en entrevista para el Daily Mail que, “en la carta, Jacintha cuestiona algunos de los tratos que recibió en el hospital. El tono de sus palabras es muy crítico”. The Guardian también publicó, a partir de información provista por dos fuentes cercanas, que una de las cartas denuncia el maltrato que sufrió en su centro de trabajo. La sospecha de que algo serio pasó ha sido motivada por la gravedad de su decisión.
El doctor William Ian Miller, en su estudio La humillación, distingue tres emociones que, pese a que comparten ciertas similitudes, provocan reacciones distintas: embarrasment (turbación), shame (vergüenza) y humilation (humillación). Miller señala que una misma situación puede provocar cualquiera de los tres sentimientos, y que será el contexto, la forma en que se trate a la persona que cometió el error o que recibe la broma, lo que generará uno de ellos. Por ejemplo, si una persona comete una gaffe en público y sus amigas se burlan de ella, probablemente sentirá turbación; pero si su jefa es la que se burla, sentirá vergüenza; ahora bien, si la jefa, junto con toda la oficina, se burlan, probablemente se sentirá humillada. La diferencia entre “burlarse” de alguien o humillarlo radica muchas veces en la relación que se tenga con él. Si la persona no puede “devolver” la burla, seguramente quedará victimizada por ella. Además, Miller vincula la herida al sentido del honor con un sentimiento de rabia e indignación tan fuerte que podría desembocar en un acto violento. Es para pensar, ¿no?
Por lo pronto, las reparaciones –simbólicas y económicas– ya comenzaron. De un lado, una misa en su honor en la catedral de Westminster, a donde asistieron el viudo y los hijos de 16 y 14 años. Del otro, la radio australiana 2Day FM, que fue objeto de una intensa polémica tras obtener los datos clínicos de la duquesa Catalina mediante el engaño, volverá a contar con anuncios después de que se suspendiera temporalmente su actividad publicitaria. Los propietarios de la emisora han anunciado que destinarán parte de los ingresos a la familia de Jacintha Saldanha. “Sentimos mucho lo sucedido. Ha sido una tragedia espantosa y esperamos que contribuyendo al fondo creado para su memoria podamos ayudar de algún modo a la familia en un momento tan difícil como éste. La compañía reitera hoy de nuevo que está profundamente afectada por este evento trágico e imprevisto y ofrecemos nuestro pésame a la familia de Jacintha Saldanha”. También la compañía confirmó la suspensión del espacio Hot 30, en el que trabajaban Mel Greig y Michael Christian, los locutores que suplantaron la identidad de Isabel II y el príncipe Carlos, y anunció que de ahora en adelante todos los engaños y bromas telefónicas quedan absolutamente prohibidos en sus programas. Mientras tanto, los locutores Greig y Christian tuvieron que ser instalados en lugares protegidos, según informó este viernes la policía australiana, pues han recibido amenazas de muerte. Hasta el momento, de acuerdo con fuentes oficiales, los conductores y al menos 10 ejecutivos tienen protección de agentes de seguridad privada.
En su ya clásico ensayo sobre el suicidio, A. Álvarez señala las múltiples razones que llevan a una persona a quitarse la vida: además de las clásicas de desesperanza, angustia y gran frustración existencial, también están el enojo, el deseo de lastimar y de vengarse. Habrá que ver qué información arroja Scotland Yard para este caso, pero por lo pronto la reflexión sobre cómo la humillación se puede convertir en violencia ofrece una pista interesante para interpretar el suicidio de Jacintha Saldanha.
Fuente: Proceso