A lo largo del año se suceden varias fechas mágicas, o especiales por su significado y su vibración, y durante esos momentos, las energías planetarias alcanzan una intensidad especial. Según el calendario místico, el 1. de mayo se conmemora Beltane, la fiesta celta del amor, que celebra la estación más luminosa del año.
Beltane está relacionada con el dios celta Belenos, comparable a Apolo del panteón clásico. Es un dios luminoso cuyo nombre significa “brillante”, y se le atribuían poderes curativos. De ahí el nombre de Beltane, que para los celtas significaba “buen fuego”, “fuego resplandeciente”. Los celtas celebraban la unión del Dios y la Diosa, el período de fertilidad.
Este festival de fuego y fertilidad tiene una larga historia. Se celebraba el primer día de mayo con hogueras, danzas y rituales. Los celtas honraban la fertilidad de los dioses con regalos y ofrendas que a veces incluían sacrificios de animales o humanos. Es un momento de renovación, de resurrección, que anunciaba un cambio de ritmo de vida, puesto que es el comienzo del ciclo de actividades diurnas: las cacerías, el trabajo rural, y el pasaje entre el período frío y cálido, entre la oscuridad y la luz.
Los festejos y rituales tenían por finalidad contribuir con su Luz a la Fuerza Creadora que emana de la Diosa y el Dios. Beltane es una época de amor, de crecimiento y prosperidad y todas las criaturas se benefician con la época fértil de la Madre Tierra: las flores, los animales, y también las personas.
Era costumbre quemar en las hogueras un muñeco de paja, que representaba el invierno y el sufrimiento. Cuando las fiestas finalizaban, hombres y mujeres se perdían en rincones del bosque para hacer el amor y reforzar la fertilidad de la naturaleza. Los niños concebidos durante estas fechas se consideraban hijos de los dioses.
Cierra tus ojos por un instante y déjate llevar por el espíritu del hombre de la antigüedad: después del largo invierno y sus carencias, llegaba el Sol derramando sus bendiciones, con su calor y su alegría, dando paso a la época de esplendor y plenitud, ¡era uno de los momentos más esperados del año!
Una tradición antigua afirma que Beltane es época de hadas, por lo tanto se dejaban ofrendas de comida y dulces o joyas, para premiar el duro trabajo que ellas realizaban para hacer crecer las flores en bosques y prados.
Los paganos de hoy, celebran Beltane al igual que lo hicieron sus antepasados, por supuesto sin detalles oscuros y dando a esta festividad interpretaciones diferentes, de riqueza y abundancia.
Si te sientes en sintonía con la naturaleza y sus ciclos, Beltane es el momento perfecto para atraer la abundancia, la prosperidad y la fertilidad en cualquiera de sus manifestaciones: concebir un hijo, comenzar un amor o una nueva etapa, disfrutar de la fecundidad de tus esfuerzos, o simplemente del estallido de las flores de tu jardín.
Fuente: Huffinton Post