El dirigente del Movimiento Regeneración Nacional, Andrés Manuel López Obrador, sostuvo que si la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) rechaza la validez de una consulta popular en materia energética será como permitir una dictadura.
Eso sería “violar flagrantemente la Constitución y acabar con el estado de Derecho, es un golpe de Estado” y “entrar de manera descarada a una dictadura”.
Dijo que son empleados del Poder Ejecutivo, “pero ni modo que den un golpe de Estado”.
Si “niegan el derecho del pueblo a la consulta es violar flagrantemente la Constitución y acabar con el estado de Derecho, es un golpe de Estado”.
Sería algo muy irresponsable de parte de la “mafia del poder”, porque se cerrarían todos los cauces legales.
“Imagínense que no les permitan al pueblo ser consultado, existiendo ese derecho en la Constitución, habiendo una ley reglamentaria, desconocimiento eso sería un golpe de Estado y no creo que se atrevan”, dijo en entrevista al iniciar una gira por la entidad.
Dijo que ha iniciado un “bombardeo mediático” para apuntalar la reforma energética.
En San Mateo Atenco y en su cuenta de Facebook el tabasqueño dijo que hay un “descarado el contubernio” entre la presidencia, la secretaría de Comunicaciones y Transportes del gobierno federal y la empresa española OHL al otorgarle una concesión para construir 13 kilómetros de segundos pisos en Puebla.