El Gobierno de Colombia y las Fuerzas Armas Revolucionarias de Colombia (FARC) anunciaron en La Habana, Cuba, un importante acuerdo sobre justicia que incluye la creación de un tribunal especial para la paz. Los garantes del cumplimiento del acuerdo son Cuba y Noruega
El presidente colombiano Juan Manuel Santos y la guerrilla de las FARC anunciaron el miércoles un acuerdo clave que prepara el terreno para poner fin al conflicto bélico de más de 50 años.
En una declaración conjunta, el mandatario y los rebeldes, encabezados por su máximo líder, “Timoleón Jiménez”, o “Timochenko”, dijeron superar un obstáculo significativo para lograr un acuerdo de paz, al decidirse por una fórmula para reparar a las víctimas, y castigar a los rebeldes y militares por abusos en contra de los derechos humanos.
“Vamos a lograr el máximo de justicia para las víctimas y no habrá impunidad”, dijo Santos. “Con Timochenko, hemos acordado que a más tardar en seis meses debe concluir esta negociación”.
Los rebeldes que confiesen sus crímenes, indemnicen a las víctimas y prometan no tomar de nuevo las armas recibirán hasta ocho años de cárcel en áreas especiales que todavía deben ser determinadas.
El acuerdo incluye la creación de una Comisión de la Verdad que investigue los delitos cometidos, una jurisdicción especial para la paz, que investigará estos delitos y sancionará a sus responsables, y la no amnistía para los autores de delitos de lesa humanidad.
El proceso judicial pactado entre las partes estará basado en el reconocimiento de la verdad y de los delitos cometidos. Quienes reconozcan delitos muy graves serán condenados a un mínimo de cinco años y a un máximo de ocho años de restricción de la libertad en condiciones especiales.
Los que se nieguen a reconocer delitos y resulten culpables podrán pasar hasta 20 años de cárcel en condiciones ordinarias.
“Nos complace anunciar que esta jurisdicción para la paz ha sido diseñada para todos los involucrados en el conflicto, combatientes y no combatientes, y no solo para una de las partes”. Santos por su parte dijo que “vamos a lograr el máximo de justicia posible para las victimas, la máxima satisfacción posible de sus derechos” señaló.
El anuncio fue hecho en La Habana, donde representantes del gobierno y de la guerrilla han sostenido negociaciones desde hace casi tres años para tratar de poner fin a más de medio siglo de confrontaciones entre las partes.
El acuerdo plantea la creación de tres salas de justicia y un tribunal para la paz con cuatro secciones que no dependerá del poder judicial colombiano. En dicho tribunal participarán jueces colombianos y extranjeros.
Santos viajó a La Habana, donde las conversaciones se han adelantado por tres años, para hacer el anuncio junto a la cúpula de las FARC.
Fuente: AP