Santos Ramírez Rojas, jefe de plaza del grupo criminal Guerreros Unidos en Cuautla, Morelos fue detenido por elementos de Investigación Criminal; sin embargo, tras su captura comenzó a presentar síntomas de infarto y falleció cuando era atendido en un hospital de esa ciudad.
La detención de Ramírez Rojas El Chino se logró tras el arresto de una mujer identificada por las autoridades como cabecilla de una célula de narcomenudistas de Guerreros Unidos.
Antonia Ramírez Balbuena La Antonia, llegó al penal de Cuautla para realizar una visita a su hija presa, pero al ingresar los elementos de seguridad le hallaron cuatro bolsas de cocaína y una lista de compradores.
Tras ser detenida, la mujer confesó a las autoridades que varios integrantes de la organización se reunirían en la Unidad Deportiva San José de Cuautla.
Elementos policiacos y militares acudieron al lugar a tratar de capturar a los presuntos sicarios el pasado jueves 5, pero los criminales al ver llegar a los soldados huyeron y sólo fue capturado Santos Ramírez.
Al ser trasladado a los separos policiacos, El Chino se comenzó a sentir mal y fue llevado al hospital, donde posteriormente murió a consecuencia de un infarto causado por una sobredosis.
Familiares del sujeto acusaron que El Chino fue golpeado por los agentes, por lo que el mismo jueves por la noche todos los policías que participaron en su captura quedaron detenidos y sujetos a investigación para deslindar responsabilidades.
De acuerdo con un comunicado de la Fiscalía General de Morelos, el resultado de la necropsia de ley indica que la causa de muerte de Ramírez Rojas fue por “infarto agudo al miocardio, secundario a consumo de cocaína, ya que conforme al examen toxicológico, el occiso dio positivo. Además el hombre contaba con antecedentes de hipertensión de larga evolución”.
Las autoridades acusaban a El Chino de haber participado en más de 15 ejecuciones registradas en el último mes en la región oriente de Morelos, además de estar implicado en varios secuestros.
Fuente: Proceso