El oficialismo de izquierda recibió este domingo un revés electoral en Bolivia al perder la posibilidad de gobernar las ciudades más pobladas del país, según los primeros resultados de sondeos en boca de urna de las elecciones regionales.
La dividida oposición boliviana celebraba el lunes su posible victoria frente al gobernante Movimiento al Socialismo del presidente Luis Arce y del exmandatario Evo Morales aunque aún no se conocen los resultados oficiales de las elecciones de alcaldes y gobernadores, cuyo cómputo avanzaba lentamente, reporta la agencia AP.
Las dos encuestas de boca de urna para cadenas de televisión proyectaron el domingo en la noche victorias de los opositores en ocho de las 10 alcaldías más grandes, entre ellas las de La Paz y Santa Cruz, mientras el Movimiento al Socialismo (MAS) podría retener cuatro de nueve gobernaciones y en otras cuatro se perfilaba una segunda vuelta.
“El pueblo boliviano ha decidido equilibrar el poder que adquirió el MAS el año pasado”, dijo el empresario y líder de la derechista Unidad Nacional (UN), Samuel Doria Medina. El opositor Luis Fernando Camacho, candidato a la gobernación de Santa Cruz, salió a festejar su posible victoria en ese reducto opositor. El expresidente Carlos Mesa, segundo en los comicios presidenciales de octubre, felicitó “la participación meritoria” de sus candidatos.
En tanto Morales (2006-2019) dijo por Twitter que “el MAS se ha consolidado como la primera fuerza política… y los militantes y simpatizantes deben sentirse orgullosos”. El político partió el lunes a Buenos Aires -donde estuvo asilado hasta noviembre del año pasado- pero no mencionó los motivos de su viaje.
El expresidente renunció en noviembre de 2019 tras unas elecciones denunciadas como fraudulentas en las que buscaba un cuarto mandato consecutivo, lo que sumió al país en un estallido social que dejó 36 muertos y la asunción de un gobierno interino de derecha encabezado por Jeanine Áñez hasta las nuevas elecciones de octubre pasado.
Arce no hizo comentarios públicos después de los comicios.
“Tendrá que gobernar con gobernadores y alcaldes que políticamente no le son afines y esa situación puede complicar la gobernabilidad”, comentó a The Associated Press el profesor de Ciencia Política, Carlos Cordero.
Las proyecciones indican que el MAS tendrá menos votos que en los comicios presidenciales, que Arce ganó con el 55%, pero en los comicios para elegir gobernadores y alcaldes ratificó que sigue siendo el único partido con presencia nacional frente a una dividida oposición cuya fortaleza son sus liderazgos regionales, según los expertos.
El MAS llegó dividido a los comicios y podría haber perdido la ciudad de El Alto, vecina de La Paz, su reducto más fiel y donde parece haber ganado la disidente y expresidenta del Senado Eva Copa. Varios militantes del partido oficialista acusaron a Morales durante la campaña de haber impuesto candidatos.
La del domingo fue la segunda elección en cinco meses en plena pandemia y en momentos en que los contagios de COVID-19 están en lento ascenso y hay poco más de 30.000 inoculados. Hasta ahora el país acumula 254.273 casos y 11.823 decesos.
Si se confirma la segunda vuelta para gobernadores en algunas regiones el cómputo final podría demorar más de una semana, anticipó el presidente del Tribunal Supremo Electoral, Salvador Romero. Si hay balotaje será el 21 de abril.
Fuente: AP