El presidente Andrés Manuel López Obrador precisó que la marcha del próximo domingo no es por la reforma electoral, sino para fortalecer el movimiento de transformación y celebrar los logros, como el que 12 millones de adultos mayores tienen una pensión y desde el primero de enero recibirán 25 por ciento más.
Dijo que la reforma electoral está en análisis y ante el cuestionamiento que hizo un vocero del gobierno de Estados Unidos a la reforma electoral, dijo que nunca falta “alguien que quiera declarar, es parte de su tradición, de sus malas costumbres, el injerencismo, pero tampoco pasa nada”. Dijo que no está mal la crítica y agregó que “vinieron a México líderes del conservadurismo del mundo y no pasa nada”. Los conservadores siempre han ido a buscar apoyo al extranjero y no cambian, dijo.
Durante la conferencia matutina en Palacio Nacional, convocó a todos los ciudadanos que están a favor de la transformación que se ha llevado en los últimos cuatro años para que acudan el domingo, “es una marcha y un acto por los avances que se han logrado”.
Dijo que es una marcha festiva, alegre, “no diría triunfal, pero sí de satisfacción, felicidad, por estar viviendo estos tiempos interesantes, momentos espectaculares de la historia de México, estar enfrentando el conservadurismo rancio y llevar a cabo una transformación como lo fue la Independencia, la Reforma, la Revolución”.
Añadió que “estamos arrancando de raíz el régimen producto de injusticia y privilegios. Tenemos mucho que celebrar. La mayoría de la gente esta contenta, no es asunto de colores, es que estamos llevando a cabo un proyecto de transformación distinto al que se impuso en los últimos tiempos”.
Mencionó que a los conservadores “no les gusta que digamos ‘abrazos no balazos’ porque ellos son muy autoritarios, violentos, les gustan las guerras, tienen la idea de que se nace malo por naturaleza, nosotros sostenemos que son las circunstancias lo que lleva a algunos a tomar el camino de las conductas antisociales, pensamos que si cambiamos las circunstancias, mejoran las condiciones de vida, de trabajo, esa es la diferencia”.
Apuntó que tenemos que garantizar las libertades a todos, luchar por la vía pacífica, rechazar la violencia, y siempre hemos actuado de la misma manera, “entonces ¿Por qué se extrañan de que vamos a marchar el domingo? Invito a todos a participar, debemos estar contentos, hemos enfrentado situaciones difíciles como la pandemia, la crisis económica”.
La marcha saldrá del Angel de la Independencia a las 9 horas el domingo, “la gente viene por su propia voluntad, son millones de mujeres, hombres, libres concientes que respaldan el movimiento. No se de donde sacan que habrá acarreados, si tenemos 70 por ciento de aprobación. De 80 millones de ciudadanos, son como 50 millones, el 70 por ciento” y si no hubiera esa aprobación, ya nos hubiesen derrotado, dijo.
Añadió que en este periodo ha habido “una gran campaña de alfabetización política y México ya puede sacar la bandera, es de los países del mundo con alfabetismo político, eso es un gran logro. Todavía falta, sobre todo en algunos sectores, pero no podemos estar pensando en el totalitarismo, en la democracia tiene que haber pluralidad. Dice que el país esta polarizado, no , está más unido que nunca, la inconformidad está en la élite”.
El mandatario federal dijo que “quiero encabezar la marcha con otros dirigentes, y quienes nos quieran acompañaran. Me gustaría que estuviesen los fundadores, que vienen desde hace años luchando por convertir en realidad este sueño y si ya están grandes, por su estado de salud, nos esperen en el Zócalo”.
Cuestionó que quienes defienden al actual INE, por qué no dijeron Pemex no se toca, la educación pública no se toca, las prestaciones y el salario de los trabajadores no se tocan, las tierras ejidales no se tocan, “quieren que siga cobrando 400 mil pesos mensuales el director y los consejeros del INE, esa es su gran lucha, su bandera, el defender el fraude electoral, la corrupción, el abuso, la antidemocracia (…) Pero ya dije, somos libres y afortunadamente la mayoría en México está muy conciente”.
Fuente: La Jornada