“La guerra no ha terminado”, advirtió la diputada perredista Purificación Carpinteyro a quienes la sacaron de la discusión de la ley reglamentaria en materia de telecomunicaciones. Además, pidió que a otros legisladores que sí tienen conflicto de interés se les evalúe de la misma manera que se hizo con ella.
A mí, dijo, “me dieron una patada en la espinilla, me doblaron; eso no significa que ya terminó ni que la guerra ya fue ganada. Esto es nada más una patada con la que me sacaron de este juego, pero no es el único y esto va para largo; seguiré en la lucha y en la batalla”.
En entrevista con Ciro Gómez Leyva en Radio Fórmula, Carpinteyro aseguró que determinó salirse de la discusión para no enturbiar el proceso y porque “se lo debo a México y a una causa que he enarbolado desde hace mucho tiempo”.
Asimismo advirtió que sigue con la idea de demandar a quien resulte responsable por espionaje telefónico, luego de que el pasado martes 24 se difundió un audio en el que se escucha a la legisladora en una plática telefónica con el empresario José Gutiérrez Becerril para proponerle un negocio de reventa de servicios de telefonía móvil, televisión de paga e internet.
Según la legisladora, Televisa fue la responsable de la grabación y de la difusión desde Twitter del audio.
La exfuncionaria calderonista reiteró que no renunciará a su cargo, y agradeció el apoyo que le dio el coordinador de los diputados del PRD, Silvano Aureoles, cuando “la tendencia –apuntó– hubiera sido tratar de abandonar a una persona que está siendo objeto de un linchamiento conducido por quienes tienen interés de eliminar mi voz en ese debate”.
Sin embargo, sostuvo, como partido se mantuvieron y no puedo más que estar perdidamente agradecida por ello.
“Así es la política, al que se mete a un tanque de tiburones, el que salga mordido es parte de las expectativas, pero me voy a volver a aventar”, soltó.
Ayer, en un comunicado que difundió para excusarse de participar en el debate de la ley reglamentaria en materia de telecomunicaciones, Carpinteyro subrayó que actualmente no tiene “ningún vínculo comercial ni de negocios en el área de telecomunicaciones”.
Lo que es un delito, agregó, es legislar para favorecer solo a unos y no a todos los mexicanos.
Además, pidió que su caso sirva de ejemplo para que todos aquellos legisladores que sí tienen conflictos de intereses explícitos se excusen de la misma manera en la que lo hizo ella con el fin de que el proceso de debate, discusión y votación de las leyes secundarias en telecomunicaciones se haga “siguiendo el espíritu constitucional, reflejando los preceptos de libertad y rechazo a los monopolios que mi partido y yo misma siempre hemos defendido”.
Y remató:
“Exhorto a los legisladores de la ‘Telebancada’ a que me acompañen a mirar desde la barrera este proceso histórico; a que pongan a México en el papel preponderante y no a los medios que les mandan y les pagan; a que no teman en aceptar que no son imparciales y neutrales”.