En el norte de Inglaterra apareció una enorme escultura de parque de una mujer acostada, obra del escultor Charles Jencks, reporta The Press Association (AP).
La obra de arte tiene una longitud de cerca de cuatrocientos metros, constituyendo la más grande imagen escultórica de una persona en la Tierra.
Los gastos para la creación de esta obra han ascendido a cerca de tres millones de libras esterlinas.
Los habitantes del lugar han interpretado ambiguamente la escultura, habiéndola apodado la “gorda vulgar”, y las feministas acusaron a los autores del proyecto de discriminación de las mujeres.
