El presidente Andrés Manuel López Obrador atribuyó el incremento de la corrupción a la política neoliberal que permitió los abusos de las cúpulas del poder político y económico en el país.
El mandatario se refirió a la caída de México en el Índice de Percepción de la Corrupción (IPC), elaborado por la organización Transparencia Internacional.
“Vean lo de Transparencia Internacional, cómo estábamos en corrupción cuando empezaron a medir y cómo estamos ahora en el mundo. Es de los países, México, desgraciadamente, con más corrupción”, dijo.
“Pero eso es fruto podrido de la política neoliberal, que fue una política de pillaje, de saqueo”.
El presidente insistió en que su administración no protegerá a ningún funcionario que haya incurrido en actos ilegales, pero descartó que se vayan a emprender acciones mediáticas y espectaculares como parte del combate a la corrupción.
“Las investigaciones que están en curso sobre hechos de corrupción tienen que continuar. No somos tapadera de nadie. Todas las investigaciones que están abiertas deben de definirse y castigarse a los responsables, que no haya impunidad. Ese es mi planteamiento”, aseveró.
“Al mismo tiempo, no quiero caer en lo espectacular como lo hacían antes, que va a la cárcel este político y un pez gordo, ahí va, pura faramalla. Y seguía el régimen de corrupción, o sea, son los chivos expiatorios. Entonces, ya basta con eso”.
Indicó que el sexenio donde creció más la desigualdad y la pobreza fue el del expresidente Carlos Salinas de Gortari.
“Con la política de privatización creció la desigualdad como nunca y se puede probar con datos del Banco Mundial. ¿Saben en qué sexenio creció más la desigualdad? En el sexenio de la desigualdad, Salinas es el padre de la desigualdad moderna, estamos hablando conceptualmente, o sea no es un asunto político es conceptual, de fondo, entonces más pobreza, más corrupción, más violencia, mi condena es al régimen”.
López Obrador aseguró que, en su Gobierno, el combate a la corrupción se impulsará desde la Secretaría de la Función Pública (SFP).
Además, confió en que la Fiscalía Anticorrupción actúe con autonomía y no tenga tolerancia ni impunidad.
“Crearon eso, el consejo anticorrupción, la Fiscalía Anticorrupción, pensando que iba a ser como otros organismos que han creado para la simulación”, expresó.
“Pero eso ya se terminó. Ahora la Fiscalía Anticorrupción va a tener autonomía y va a actuar con libertad y se va a castigar a corruptos. Va en serio, ya se tiene ese instrumento, se va a utilizar”.
El tabasqueño consideró que lo mismo ocurrirá con la Fiscalía Especializada en Delitos Electorales, tras confiar en que el Congreso apruebe que ese tipo de delitos sean castigados con prisión.
“El que compre votos, el que entregue despensas, frijol con gorgojo, para obtener votos; el que utilice presupuesto para favorecer a partidos, para favorecer a candidatos, se va a ir a la cárcel”, afirmó.
El informe de Transparencia Internacional, presentado ayer en Alemania, reveló que durante el Gobierno de Enrique Peña, México tuvo una drástica caída mundial en el combate a la corrupción.
En los seis años de esa Administración federal, el país cayó 33 lugares en el ranking de posiciones, al pasar del 105 en 2012 al 138 el año pasado.
Esta calificación coloca al país en el último sitio entre los miembros de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) y en el penúltimo de las naciones integrantes del G-20, sólo por encima de Rusia.
Fuente: Reforma
