El gobernador del estado, Javier Duarte de Ochoa, fue literalmente acorralado por habitantes de Altotonga y comunidades aledañas, quienes le exigen autorice la canalización de recursos para rehabilitación de los caminos, que derivado de ello, les ha originado una serie de problemas en dicha zona.
El ejecutivo estatal, visitó el lugar para supervisar los trabajos que realizan las brigadas de apoyo del Ejército Mexicano, en coordinación con la Secretaría de Seguridad Pública y la Secretaría de Protección Civil.
En su visita a la zona de desastre originada por el desgajamiento del cerro Xaltepec, Altotonga, al norte de Veracruz, el cual sepultó a un autobús de pasajeros dejando a 12 personas muertas, los habitantes se dieron cita en el lugar para exigirle directamente se trabaje en la habilitación de los caminos, pues argumentan estos llevan muchos años en malas condiciones y no son atendidas por parte de la Secretaría de Comunicaciones (Secom).
En las redes sociales, se pudo apreciar un video donde un gran número de personas rodean al mandatario estatal para exigirle –literalmente- este ordene de manera inmediata atienda las necesidades de los municipios y comunidades de la zona norte del estado veracruzano, los cuales están incomunicados.
Javier Duarte de Ochoa, acompañado de guaruras y medios de comunicación, instó a los quejosos quienes le gritaban insistentemente acusando a su administración no atender la rehabilitación de caminos, ni del puente Cotaxtla, el cual lleva dos meses parada la obra.
“Nosotros varias veces le hemos tomado la Secretaría (…) El puente de Cotaxtla lleva dos meses parado, que según lleva el 70 por ciento pero no es cierto, siempre es lo mismo”, le gritaban los habitantes.
Molesto y con una actitud de prepotencia, el gobernador del estado, les insistió que dichas afectaciones no era “cuestión de caminos” sino de que el cerro se desgajó.
“Esto no es cuestión de caminos (…) ¡Bueno ya! Ahí están las maquinas” les respondió colérico al sentirse acorralado por la multitud que literalmente lo rodeó.
Sin más preámbulos, el ejecutivo estatal subió a su Suburban para impedir que los manifestantes prosiguieran demandando la prontitud de los trabajos en los caminos, los cuáles reportan daños relevantes históricos y ahora con el paso de las tormentas tropicales, Ingrid y Manuel, han desaparecido casi en su totalidad.
Fuente: AGN