Es necesario reducir la tasa del IVA a un 8% en la frontera “para lograr una posición competitiva en el comercio juarense” frente a El Paso, Texas, donde anualmente los mexicanos gastan 2 mil 400 millones de dólares. La propuesta está incluida en Competitividad comercial y política fiscal en la zona fronteriza Ciudad Juárez-El Paso, Texas, un amplio estudio de la UACJ que también propone el establecimiento de una zona franca.
Sin embargo, el presidente Enrique Peña Nieto propuso el domingo 8 de septiembre una reforma a la Ley General del Impuesto al Valor Agregado para elevar la tasa del IVA del 11 al 16% en la frontera. Ver nota de contexto: Peña subirá del 11 al 16% el IVA en Juárez
“Para lograr una posición competitiva en el comercio juarense, se hace necesario considerar la posibilidad de reducción de la tasa del IVA en la frontera a un 8%, tomando en cuenta el historial de cambio de tasas desde 1980 a la fecha”, se recomienda en el estudio comparativo Competitividad comercial y política fiscal en la zona fronteriza Ciudad Juárez-El Paso, Texas realizado por investigadores de la UACJ.
En México, según las conclusiones, “independientemente del diferencial de tasa de las fronteras en relación con el resto del país, que existe en la actualidad, los impuestos al consumo contemplan un elevado número de artículos gravados que por su volumen de consumo coloca al comercio fronterizo en franca desventaja frente a su vecino competidor”.
“La falta de oportunidad en la devolución de los impuestos de los contribuyentes –se agrega–, así como su trámite, en exceso documentado y lento, propicia costos financieros adicionales a la operación de las empresas comerciales que tienen forzosamente que afectar el precio de las mercancías ofertadas, este mismo hecho se refleja por el traslado en cadena del Impuesto al Valor Agregado, que si bien, es su naturaleza, ello diferencia en parte sustancial la estructura de los precios con relación con la del comercio norteamericano”.
“La inexistencia de un mecanismo que permita al comprador extranjero de menudeo, el aprovechamiento de la exención o bien de ser considerado como un adquirente de bienes exportados y clasificando éstos en la tasa cero, no permite al comercio fronterizo mexicano igualar las condiciones de ventaja que en el impacto al consumidor repercute como baja de precio”, se explica.
“Dada la limitante que la legislación mexicana y el convenio de coordinación fiscal del estado de Chihuahua con la Federación imponen a la autoridad hacendaria local, al Ejecutivo del estado y al propio Congreso Estatal, no existe posibilidad que se utilice como instrumento de desarrollo y promoción del sector comercial el estímulo fiscal de reducción o suspensión temporal de este impuesto”.
“Ahora bien –se afirma–, mientras que en Estados Unidos y concretamente en el estado de Texas, el contribuyente recibe una remuneración por la recaudación que del impuesto sobre la ventas (Sales Tax) realiza, en México no existe disposición legal alguna que retribuya al contribuyente el costo que representa el ser intermediario del fisco y responsable en sentido amplio de la recaudación y entero del Impuesto al Valor Agregado”.
¿Por qué una zona franca?
La investigación intitulada Competitividad comercial y política fiscal en la zona fronteriza Ciudad Juárez-El Paso, Texas fue coordinada por el entonces rector de la UACJ, Javier Sánchez Carlos y René Soto Cavazos. Se presentó el 29 de febrero de 2012.
La conclusión “es la propuesta del establecimiento de una zona franca en esta localidad para superar la difícil situación económica que enfrenta desde hace algunos años”, según dio a conocer la UACJ en un comunicado de prensa en aquella ocasión.
El entonces rector Sánchez Carlos dijo que “este trabajo fue entregado ya al presidente de la república Felipe Calderón Hinojosa, al gobernador del estado, César Duarte Jáquez, así como a los titulares de las secretarías de Hacienda y Economía federales y de Economía estatal, a fin de que sea considerado para la toma de decisiones”.
Sánchez Carlos dijo que el establecimiento de una zona franca en esta frontera puede lograrse a través de una reforma económica o bien, de una manera más directa, con un decreto del jefe del Ejecutivo.
Ciudad Juárez se encuentra en una situación geográfica muy diferente a la que tienen otras ciudades de la frontera norte del país, ya que hay una cercanía inmediata con El Paso, Texas, que la coloca en una situación desventajosa para competir con el comercio de esa ciudad, se explicó en la presentación.
Las cargas que representan los diferentes impuestos que se aplican en el país le quitan una posible competitividad y que puede superarse con el establecimiento de una zona franca en Ciudad Juárez.
El investigador Adrián Rodríguez Rentería dijo que la zona franca es un territorio bien definido en el que a la mercancía que proviene del extranjero no se le aplica el régimen aduanero vigente o se le aplica diferencial con relación al resto del país.
Esta situación haría que el comercio local tuviera una mayor competitividad con el paseño, ya que podría ofrecer mejores precios en los productos de origen extranjero, lo que generaría una mayor actividad económica en la frontera, más fuentes de trabajo y mayores ingresos al Estado por la vía de los impuestos.
Con el trato fiscal preferencial en esta frontera, con el establecimiento de la zona franca, no solo se apoyaría la actividad comercial, sino que se podría estimular la instalación de industrias nacionales y extranjeras, lo que generaría un importante desarrollo económico y social en esta ciudad, explicó Rodríguez Rentería.
Dar clic para consultar el estudio Competitividad comercial y política fiscal en la zona fronteriza Ciudad Juárez-El Paso, Texas de la UACJ
