Netanyahu amenaza: ‘No permitiremos que nuestros soldados sean arrastrados al Tribunal de La Haya’ y no sólo busca demandar a Palestina por crímenes contra la humanidad sino que le retiene ilegalmente 100 millones de euros recaudados en impuestos a palestinos
Por Sal Emerguie/ El Mundo
Ojo por ojo y diente por diente. Parece que la antigua norma bíblica se aplicará en el nuevo escenario de la lucha entre israelíes y palestinos: la vía judicial internacional. Horas después de que el embajador palestino en la ONU, Riad Mansur, presentara la carta oficial de solicitud de adhesión a la Corte Penal Internacional (CPI) para poder denunciar en el futuro “los crímenes de la potencia ocupante”, el gobierno de Benjamin Netanyahu amenaza con la misma moneda en tribunales de Estados Unidos y otros países. Así lo revela un alto funcionario a la agencia Reuters.
De momento, ha decidido sancionar económicamente a la Autoridad Nacional Palestina (ANP) al congelar la transferencia de 500 millones de shékels (100 millones de euros) correspondientes a los impuestos palestinos del mes de diciembre. Son tasas que Israel recauda mensualmente en nombre de la ANP siguiendo los parámetros marcados por los Acuerdos de Oslo. “Es un acto de piratería contra el derecho internacional ya que es dinero palestino. No se trata de caridad israelí”, replica el dirigente de la OLP, Saeb Erekat.
Esta medida de represalia no es ninguna sorpresa ya que fue anunciada hace una semana por el ministro israelí Yuval Steinitz en caso de que el presidente palestino, Abu Mazen, acudiese a la CPI. Tampoco es la primera vez. Hace dos años, Netanyahu congeló la transferencia mensual en respuesta a la iniciativa de Abu Mazen de acudir a la ONU para obtener el reconocimiento del Estado palestino. Al final y debido a la presión norteamericana y el temor a la desintegración de la ANP, Netanyahu anuló la medida.
El primer ministro israelí ha afirmado este domingo que “la Autoridad Palestina ha decidido lanzarse a un enfrentamiento con Israel y nosotros no podemos quedarnos con los brazos cruzados. No permitiremos que arrastren a los soldados y oficiales del ejército al Tribunal de La Haya. De la misma forma que ellos nos defienden, les defenderemos con la misma determinación y energía”.
En un aviso a la Mukata de Ramala de que su firma para adherirse al Tribunal de La Haya puede tener un efecto boomerang, fuentes israelíes advierten: “Los palestinos deberían tener miedo a las iniciativas legales. Israel estudia todas las posibilidades a su alcance para emprender una causa judicial a gran escala contra Abu Mazen por crímenes de guerra y acciones terroristas”. “Crímenes de guerra” es también el término usado por los palestinos para denunciar acciones israelíes en los territorios ocupados en la guerra del 67.
“Israel espera que la Corte Penal Internacional rechace la petición de adhesión de la Autoridad Palestina porque no es un Estado”, afirmó Netanyahu el pasado jueves tras la reunión de urgencia. “Abu Mazen forma parte del Gobierno de unidad nacional con el grupo terrorista Hamas que lanza cohetes desde poblaciones civiles de Gaza contra civiles en Israel”, añade un alto funcionario presente en la reunión.
“Estamos acostumbrados a las amenazas israelíes y estadounidenses por lo que no tenemos miedo. Actuaremos para defender los derechos del pueblo palestino. No es la primera vez que EE.UU insinúa cortar su ayuda económica”, afirma el dirigente de la OLP, Salaj Rafat, en alusión al posible recorte de los 400 millones de dólares anuales a la ANP. Erekat rechaza “las presiones y amenazas de Israel” y pronostica que “en marzo Palestina será miembro del CPI”.
La OLP y Al Fatah decidieron esta semana la vía de La Haya tras no haber obtenido la mayoría en el Consejo de Seguridad de la ONU sobre la propuesta de resolución que establecía la creación de un Estado palestino con capital en Jerusalén Este antes de finales del 2017.
EE.UU apoya la creación de un Estado palestino basado en las fronteras previas a la guerra de 1967 (con intercambio de territorios) pero solamente como resultado de negociaciones directas “que garanticen también las necesidades de seguridad israelíes”.
Según la diplomacia norteamericana, el dramático paso de Abu Mazen “enrarece el ambiente y no favorece la reanudación del proceso de paz“. Un paso que refleja la frustración palestina y la nula confianza entre los dirigentes de ambos pueblos.
Fuente: El Mundo
