La Justicia la acusa de negligencia en la “causa Tapie”; estaría implicada en el pago de una indemnización de US$530 millones por la venta de Adidas durante la gestión de Sarkozy; Lagarde adelantó que apelará la decisión
La directora gerente del Fondo Monetario Internacional (FMI), Cristina Lagarde, fue imputada por “negligencia” por la justicia francesa por su presunta participación en el llamado “caso Tapie” cuando era ministra de Finanzas dentro del gobierno de Nicolas Sarkozy.
Según precisa la agencia Reuters y medios internacionales, como El País, el asunto por el cual es investigada Lagarde, que ya anticipó que no piensa dimitir de su puesto, es la adjudicación en 2008 de 403 millones de euros que el gobierno de Sarkozy suscribió como reparación por las supuestas pérdidas que sufrió el empresario Bernard Tapie, amigo del entonces presidente de la República, en la venta de Adidas por parte del Crédit Lyonnais. El monto de la ayuda pública a Tapie fue decidido por una comisión de arbitraje que el juez Serge Tournaire calificó en el pasado como “simulacro de arbitraje”.
Lagarde, que fue interrogada por los magistrados en París en calidad de testigo, consideró que la decisión de investigarla por supuesta “negligencia” carece de fundamento, por lo que apelará. Una fuente judicial francesa también confirmó esta medida.
Según la legislación francesa, los magistrados investigan formalmente a una persona cuando creen que hay indicios de delito, pero la investigación no siempre lleva a un juicio.
El caso que salpica a Lagarde
La investigación sobre el magnate francés Bernard Tapie salpicó a varios miembros del gabinete del ex presidente francés Nicolas Sarkozy, entre ellos a Lagarde.
El millonario, uno de los mejores posicionados del país, vendió en 1993 Adidas al banco semipúblico Crédit Lyonnais. Según publica el diario El País, esa era la condición que le impuso François Miterrand para considerarlo como ministro. Al poco tiempo, el banco vendió Adidas y obtuvo importantes plusvalías, lo que llevó a Tapie a denunciar el caso y obtener, en primera instancia, una reparación de 135 millones de euros por daños más intereses. El Supremo, sin embargo, anuló esa decisión.
En 2008, su gran amigo Nicolas Sarkozy, para el cual Tapie había pedido el voto, resarció al empresario de las supuestas pérdidas. Su Ministerio de Economía formó un “tribunal de arbitraje” y este decidió otorgar a Tapie 403 millones de euros por aquel litigio, lo que escandalizó a una gran parte de la ciudadanía.
En el marco de la investigación judicial, la fiscalía acusó en 2011 a Lagarde de haber elegido una mediación privada en vez de recurrir a la vía judicial, que habría dotado de mayor neutralidad al proceso. La criticó también por “conocer la parcialidad de dos de los tres árbitros” que intervinieron en la mediación y de incluir la figura del “daño moral”, lo que favoreció aún más los intereses de Tapie
Fuente: La Nación