James Bond impidió que los padres de los normalistas desaparecidos de la Escuela Normal Rural de Ayotzinapa llegaran al Zócalo. En las pláticas con autoridades del Gobierno del Distrito Federal se estableció desde un principio la ruta de su marcha, debido al cierre de la Plaza de la Constitución por la filmación de Spectre, reporta El Universal.
“No nos dejaron que llegáramos hasta el Zócalo por la película. Que iban a cerrar, por eso decidimos llegar aquí al Monumento a la Revolución”, dijo uno de los miembros del comité organizador de la marcha que salió de la glorieta de la Columna de la Independencia, en el marco de la Décima Acción Global por Ayotzinapa, a seis meses de la desaparición de los 43 jóvenes.
Ante el aviso de esta manifestación, la Secretaría de Gobierno informó que tuvo una reunión con los organizadores y acordó que no se avanzaría a la Plaza de la Constitución para no entorpecer el rodaje del filme.
De acuerdo con la dependencia, la filmación de la película, dirigida por Sam Mendes, tenía un permiso con un mes de anticipación para ocupar la plancha del Zócalo y los manifestantes la solicitaron hace 48 horas.
Melitón Ortega, uno de los padres de los normalistas desaparecidos, comentó a El Universal que el acuerdo fue realizado por las agrupaciones sociales que organizaron la marcha; sin embargo, señaló que ni los padres de familia, ni representantes provenientes de Ayotzinapa tuvieron acuerdos con las autoridades capitalinas.
El contingente de alrededor de 4 mil personas, que salió del Ángel de la Independencia antes de las 17:00 horas, lo encabezaron padres de normalistas, seguidos por maestros de Guerrero y Oaxaca, estudiantes de la UNAM y del IPN, así como sindicatos y otros activistas.
Entre los asistentes que ni la amenaza de lluvia dispersó, estuvo el sacerdote Alejandro Solalinde, quien dijo que “seis meses de impunidad, seis meses de simular que se hace justicia, seis meses de fortalecer la PGR y la Suprema Corte de Justicia, para que no se logre la verdad”.
“Sin embargo, en el pueblo se ha despertado ese deseo de cambio, pero también un golpe en la conciencia que nos va a ayudar a la transformación de México”.
Con mantas, pancartas, lonas y consignas donde predominaba la demanda principal de “presentación con vida y castigo a los culpables”, los manifestantes cruzaron Paseo de la Reforma hasta llegar a la explanada del Monumento a la Revolución donde se realizó un mitin, aunque sólo alrededor de mil 500 personas llegaron. Ahí los padres manifestaron su apoyo y solidaridad a la periodista Carmen Aristegui, así como a los jornaleros de San Quintín, Baja California.
Desde el templete, Melitón Ortega, padre de uno de los normalistas, reiteró respecto a la suspensión de las elecciones en Guerrero:
“Tenemos que nombrar a nuestros representantes bajo el régimen de usos y costumbres, que está reconocido jurídicamente en las normas nacionales e internacionales, e incluso se aplica en muchos municipios del país.
“Otra modalidad es el nombramiento de consejos populares y municipales, y que lo realicen los comisarios municipales y organizaciones, y personas de alta calidad moral en los municipios, y la población en sus asambleas populares”.
José Caseta, de la Normal de Ayotzinapa, reconoció que el movimiento está perdiendo fuerza, ante lo cual dijo: “Ciudadanos, ustedes son nuestro apoyo, nos dan el espíritu para decirle al gobierno que, aunque nuestras fuerzas están mermando, aquí seguimos”. Aunque hubo anarquistas que vandalizaron el Ángel, no hubo detenidos.
Fuente: El Universal
