Una multitud lanzó el grito “Ni una menos” para protestar en Argentina por los crecientes feminicidos y la violencia en general contra la mujer, en una movilización inédita que abarcó un centenar de ciudades en el país.
El epicentro de la conmovedora manifestación fue la Plaza de los Dos Congresos, en Buenos Aires, donde se reunieron militantes oficialistas y opositores, personas de todas las edades, sin militancia, familias y organizaciones de la sociedad civil.
La exigencia fue unánime: ni una mujer muerta más a manos de su pareja o su ex pareja, sin protección del Estado, sin apoyo en las comisarías cuando denuncia a su agresor, sin lugares en dónde refugiarse.
Más allá de que los actos trascendieron a los partidos, también fue muy importante la participación de hombres de todas las edades comprometidos a desterrar la violencia de género, ya que la equidad es una necesidad que beneficia a la sociedad en su conjunto, no sólo a las mujeres.
El “Ni una menos” quedó plasmado en banderas, camisetas, suéteres, pancartas, gorras, pines y pasacalles (carteles) que adornaron el masivo acto en el que algunos familiares recordaron con nombre y apellido a varias de las víctimas de los últimos años.
Hasta Eva Perón, la mujer más icónica de la historia argentina, reapareció este miércoles en forma de afiches que colmaron la ciudad para sumarse a las protestas contra el machismo, y a favor de la igualdad.
El acto nacido en las redes sociales hace tres semanas a raíz del asesinato de una adolescente de 14 años que estaba embarazada, se alejó de Facebook y Twitter y se tradujo en una protesta con demandas concretas hacia todos los poderes del Estado.
Una de las principales exigencias fue el combate a la cultura patriarcal y machista que todavía hoy permite que muchos hombres traten a las mujeres como objetos de su propiedad, que naturaliza el acoso sexual en la calle y que justifica las violaciones.
Nunca antes había sido realizado aquí un acto de esta magnitud, pero el hartazgo de la sociedad civil obligó a miles de personas, no sólo a mujeres, a plantarse en las calles ante los cotidianos asesinatos de mujeres.
De acuerdo con datos de la Casa del Encuentro, una sociedad civil dedicada a combatir la violencia de género, en los últimos siete años en Argentina fueron asesinadas mil 808 mujeres, pero en los primeros meses de 2015 ya suman más de 60.
Por eso es que un colectivo de periodistas, escritoras y activistas organizó la marcha “Ni una menos”, que derivó en la propuesta de un pliego de demandas a las autoridades del Poder Ejecutivo, Legislativo y Judicial.
La demanda central fue la implementación del Plan Nacional de Acción para la Prevención Asistencia y Erradicación de la violencia contra las mujeres, la cual fue aprobada hace ocho años pero sigue sin entrar en plena vigencia.
También se exigió que esta ley se cumpla integralmente, con monitoreo y presupuesto, que se garantice el acceso a la Justicia a las víctimas con patrocinio jurídico, que las causas que tramitan en el fuero civil y penal se unan para agilizar el caso y que se realicen estadísticas oficiales.
La presidenta Cristina Fernández no fue inmune al llamado y publicó un mensaje en las redes sociales, en el que advirtió que la violencia “encuentra su máxima expresión en la agresión corporal, en la violación y en la muerte”, pero “hay otras, previas, anteriores, que van creando silenciosamente las condiciones del golpe final”.
Fuente: El Informador/ Agencias