El escándalo por abuso sexual que rodea al grupo NXIVM (nexium) y su líder Keith Raniere, obligó a Emiliano Salinas Occelli, hijo del expresidente Carlos Salinas de Gortari, y a Alejandro Betancourt Ledesma a renunciar a la dirección de en México del programa de superación personal Executive Success Programs (ESP).
Raniere está por ser juzgado en Nueva York por trata de personas y asociación delictuosa pues encabezaba un grupo secreto conformado por una veintena de mujeres que eran obligadas a tener sexo con él y forzadas a reclutar nuevas esclavas sexuales a las que marcaba como si fueran ganado.
Tras la noticia, Salinas y Betancourt emitieron un escueto comunicado dirigido a los miembros de ESP y a la opinión pública en el que informan:
“Hemos decidido ceder la dirección de esta firma en el mercado mexicano”.
Salinas y Betancourt abandonan la dirección del capítulo mexicano de ESP luego 15 años de “operación exitosa” del programa dirigido a la élite nacional. Ambos consideraron concluidas las relaciones profesionales y económicas con el corporativo NXIVM en Estados Unidos y sus entidades relacionadas.
No detallaron las razones de su renuncia que supuestamente se dio dos semanas de que México deportara a Estados Unidos a Keith Raniere.
El hombre, de 57 años, fue detenido el 25 de marzo en Puerto Vallarta, Jalisco. La justicia estadunidense lo buscaba por la declaración de ocho mujeres que lo acusaban de formar un grupo de esclavas sexuales.
También es acusado de vejar a las integrantes del grupo, conocido como DOS, algunas de las cuales fueron marcadas como ganado con las letras KR, las iniciales de Keith Raniere.
Este grupo operó en Nueva York, Canadá y México, según la acusación del Departamento de Justicia. Raniere organizó los talleres de ESP durante más de 20 años.
Salinas Occelli defendió a Raniere tras su detención, y en un comunicado expresó su “confianza” en que la justicia de Estados Unidos ratificaría “en el corto plazo la inocencia de Keith Raniere”.
El líder de NXIVM comparecerá hoy a las 14: 00 horas ante una corte federal en Brooklyn, donde escuchará los cargos que se le imputan.
Fuente: Proceso