El delegado de Gobernación en la entidad, Javier Aguirre Vizzuett, anunció que dejará este cargo para buscar convertirse en candidato del PRI a gobernador para la elección constitucional del año próximo.
Aguirre Vizzuett es hijo del exregente del Distrito Federal, Ramón Aguirre Velázquez, mismo que en 1991 regresó a Guanajuato como candidato del PRI a gobernador y se enfrentó a un panismo activo que, con Vicente Fox Quesada a la cabeza, movilizó a la sociedad, pero que también pactó desde las cúpulas con el entonces presidente Carlos Salinas de Gortari, en la llamada “concertacesión” de 1991.
Al denunciar un fraude y el apoyo oficial con millones de pesos a la campaña del PRI, Aguirre fue obligado a renunciar y a no presentarse a rendir protesta como gobernador electo en aquel entonces, y el entonces alcalde leonés Carlos Medina Placencia fue designado mandatario interino.
Esto abrió la puerta al poder para Acción Nacional, que desde entonces gobierna la entidad.
Veintiséis años después, Javier Aguirre Vizzuett buscará participar en el proceso interno del PRI, aunque evidenció el control que de la dirigencia estatal del partido tiene el senador cenecista de Salvatierra, Gerardo Sánchez, público aspirante a la candidatura desde hace algunos años.
“Mi plan A es ser candidato del PRI a gobernador y convertirme en gobernador… mi plan B es igual y mi plan C es el mismo”, dijo Aguirre, quien informó que la semana próxima dejará la delegación de la Secretaría de Gobernación.
También dijo haber cumplido como delegado –y coordinador de los delegados federales en la entidad– puesto que, según afirmó, Guanajuato recibió un fuerte apoyo del gobierno federal, independientemente de las diferencias partidistas o políticas.
Como ejemplo, refirió que la administración municipal de León, actualmente encabezada por el panista Héctor López Santillana, recibió el año pasado 4 mil 500 millones de pesos de la Federación, monto de recursos similar al que se entregó para diversos programas y obras en el trienio anterior, cuando la alcaldesa era la actual diputada federal del PRI, Bárbara Botello Santibáñez.
Javier Aguirre también reconoció que otros delegados federales en el estado aspiran a cargos de elección, pero éstos lo irán anunciando posteriormente.
“Hubo una petición desde el gobierno federal de revisar con los delegados quiénes tienen aspiraciones… no estoy autorizado a decirlo”, dijo.
“He participado en la política desde los 16 años… me he formado al lado de grandes mexicanos como Luis Donaldo Colosio”, mencionó al citar parte de su trayectoria.
Insistió en que el comité estatal tendrá que mostrar la apertura necesaria para quienes aspiren a la candidatura a gobernador, pues “respeto al senador Gerardo Sánchez, pero no estoy de acuerdo con su forma de actuar… tiene secuestrada a la dirigencia estatal con su grupo político”.
Por ello, quien entre otras cosas presumió haber sido compañero de preparatoria del exsecretario de Hacienda José Antonio Meade –virtual candidato presidencial del PRI–, afirmó que esperará la convocatoria que expida el CEN para apuntarse como precandidato a gobernador y exigirá al comité en Guanajuato respetar las reglas.
“Espero que se dé un proceso de forma imparcial y equitativa, sin manipulaciones ni chantajes”.
Fuente: Apro