“Nos dijeron que había muchísimos cuerpos más… todos calcinados. No supieron especificar cuántos”, narra vía telefónica Bernardo Benítez, padre de Bernardo Benítez Arróniz, de 25 años, capturado por agentes de Veracruz y cuyos restos fueron encontrados calcinados en el rancho El Limón del municipio de Tlalixcoyan, el lunes pasado.
Luego de casi un mes de haber sido “levantado” junto con cuatro amigos más por policías estatales y entregado a una célula delincuencial del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG), los padres de los jóvenes de reunieron la tarde-noche del lunes con elementos del Centro de Investigación y Seguridad Nacional (Cisen), de la Gendarmería Nacional y la Fiscalía General (FG) de Veracruz y recibieron los resultados de ADN que permitieron identificar a dos de los jóvenes.
A través de un hueso identificaron los restos de Benítez Arróniz y una “gota de sangre” permitió la identificación de Abraham González.
Vía telefónica desde la oficina regional de la FG, Bernardo Benítez asegura que en su caso harán otro peritaje con terceras personas, para constatar que son los restos de su hijo y así poderle dar “cristiana sepultura”. En el caso de Alfredo González, su familia no aceptó los análisis y esperarán a establecer un dictamen pericial independiente.
“Seguimos en el MP (Ministerio Público). Aquí vamos a seguir en pie de lucha y hasta llegar a las últimas consecuencias. Ayer nos dieron el resultado de la investigación. Nos dicen que se encontraron fosas con muchos cuerpos calcinados. No se pudo hacer el ADN con restos calcinados, pero hubo una parte que sí pudo ser analizada, me dicen que pertenecen a los restos de mi hijo”, relató.
En entrevista con Radio Fórmula, Bernardo Benítez dijo que el gobierno no les dio otra fecha para informarles de los avances de la investigación, que continúa hasta ahora, sin embargo, dijo:
“Lo que creemos es que con esto queda al descubierto la red de complicidad que hay en el estado con el crimen, puesto que estamos enterados que ahí mismo donde se encontraron los restos de mi hijo, eran cientos de personas calcinadas en las fosas clandestinas del rancho El Limón”, acusó.
A través de un comunicado, la Segob dio a conocer el lunes pasado que perros de la Policía Federal encontraron en un rancho de Tlalixcoyan restos óseos y manchas hemáticas que fueron sometidos a un riguroso análisis genético.
“Al efectuar la confronta de las muestras tomadas en el rancho con los perfiles genéticos proporcionados por los familiares de las víctimas, se determinó la coincidencia con dos de los jóvenes desaparecidos”, subrayó.
De acuerdo con el texto, en el rancho se levantaron indicios de que se manipulaban drogas y se manejaban equipos empleados para alterar vehículos, además de que se almacenaban de manera ilegal hidrocarburos, entre otros ilícitos.
Desde el pasado 27 de enero la Fiscalía General del Estado (FGE) de Veracruz y su directora de Investigaciones Ministeriales, María del Rosario Zamora, informaron a los padres de los jóvenes desaparecidos que hubo una inspección ocular en el rancho El Limón de Tlalixcoyan –de donde se extrajeron vestimentas–; que se realizó otra diligencia de la Gendarmería Nacional en la comunidad de Vicente en Oaxaca, muy cerca de Tuxtepec, y que el fin de semana “se peinó” el municipio de Tierra Blanca, sin resultados concretos.
José Benítez de la O, de 24 años; Mario Arturo Orozco Sánchez, de 27; Alfredo González Díaz, de 25; Bernardo Benítez Arróniz, de 25, y Susana Tapia, de 16 años, fueron detenidos por policías estatales el pasado 11 de enero en las inmediaciones del municipio de Tierra Blanca cuando regresaban de un viaje de placer a la playa.
Los jóvenes fueron supuestamente entregados al Cártel Jalisco Nueva Generación, al que los padres pidieron la libertad de sus hijos a cambio de la vida de ellos.
Bernardo Benítez comentó que la Secretaría de Gobernación y el Cisen se comprometieron a “agotar las investigaciones” hasta que quede claro por qué los detuvieron y por qué y quiénes los mataron.
“Nosotros seguiremos en la lucha hasta que se esclarezca todo”, afirmó.
Los restos de Bernardo Benítez llegaran esta tarde a Tierra Blanca. En el caso de Alfredo González esperarán una segunda opinión para poder aceptar la versión del gobierno federal.
Fuente: Proceso
