Grecia aceptó los términos de un nuevo acuerdo de rescate financiero de tres años con sus acreedores internacionales y solo faltan unos pocos detalles que se anticipa se completarán stel martes.
Al completar el acuerdo por unos 85.000 millones de euros (93.000 millones de dólares) en nuevos préstamos se evitará que el país incurra en mora la semana próxima y asegure su permanencia en la eurozona.
“Estamos muy cerca. Solo bastan dos o tres detalles menores”, afirmó el ministro de finanzas Euclid Tsakalotos al salir el martes por la mañana de una discusión con los negociadores de los acreedores que duró toda la noche.
La Comisión Europea, negociador clave en las gestiones, confirmó el progreso.
“Las instituciones y las autoridades griegas convinieron un acuerdo en principio sobre una base técnica y prosiguen las conversaciones para finalizar detalles”, afirmó Annika Breidhardt, vocera de la comisión para asuntos económicos. Anticipó que el mismo martes se esperaba completar los detalles.
La portavoz recordó que el acuerdo todavía necesita la aprobación de los representantes del más alto nivel y que los ministros de finanzas de todas las 28 naciones de la Unión Europea mantendrían una teleconferencia el martes por la tarde.
El gobierno griego espera que el parlamento apruebe un acuerdo esta semana, antes de la reunión que sostendrán los ministros de finanzas de la eurozona el viernes.
Alemania, el mayor contribuyente individual en los dos rescates anteriores a Grecia y uno de los negociadores más estrictos hasta ahora, mantenía una actitud de cautela. “Tendremos que examinar los resultados de hoy”, dijo el viceministro de finanzas Jens Spahn a la televisión n-tv.
Los inversionistas saludaron la noticia.
Grecia aceptó los términos de un nuevo acuerdo de rescate financiero de tres años con sus acreedores internacionales y solo faltan unos pocos detalles que se anticipa se completarán el martes.
Al completar el acuerdo por unos 85.000 millones de euros (93.000 millones de dólares) en nuevos préstamos se evitará que el país incurra en mora la semana próxima y asegure su permanencia en la eurozona.
“Estamos muy cerca. Solo bastan dos o tres detalles menores”, afirmó el ministro de finanzas Euclid Tsakalotos al salir el martes por la mañana de una discusión con los negociadores de los acreedores que duró toda la noche.
La Comisión Europea, negociador clave en las gestiones, confirmó el progreso.
“Las instituciones y las autoridades griegas convinieron un acuerdo en principio sobre una base técnica y prosiguen las conversaciones para finalizar detalles”, afirmó Annika Breidhardt, vocera de la comisión para asuntos económicos. Anticipó que el mismo martes se esperaba completar los detalles.
La portavoz recordó que el acuerdo todavía necesita la aprobación de los representantes del más alto nivel y que los ministros de finanzas de todas las 28 naciones de la Unión Europea mantendrían una teleconferencia el martes por la tarde.
El gobierno griego espera que el parlamento apruebe un acuerdo esta semana, antes de la reunión que sostendrán los ministros de finanzas de la eurozona el viernes.
Alemania, el mayor contribuyente individual en los dos rescates anteriores a Grecia y uno de los negociadores más estrictos hasta ahora, mantenía una actitud de cautela. “Tendremos que examinar los resultados de hoy”, dijo el viceministro de finanzas Jens Spahn a la televisión n-tv.
Los inversionistas saludaron la noticia.
Las tasas de préstamo del gobierno griego bajaron, en un indicio de que los inversionistas están menos preocupados por una posible mora. El rendimiento del bono a dos años bajó 4,2% a 14,73%. La bolsa de valores de Atenas, que reabrió recientemente después de haber cerrado durante cinco semanas durante lo peor de la crisis financiera, subía 2,2% al mediodía.
Grecia, escasa de fondos, necesita más dinero para el 20 de agosto, a más tardar, cuando enfrenta un pago de la deuda de poco más de 3.000 millones de euros al Banco Central Europeo.
Un borrador del acuerdo citado por el periódico griego Kathimerini dijo que el acuerdo incluye un paquete de más de 30 medidas que tendrán que ser sometidas a votación en el parlamento griego inmediatamente, seguido de un segundo paquete de medidas para aplicar a partir de octubre.
Detalles del plan muestran que se acordó que al final de este año el gobierno tendrá un déficit de 0,25% y un superávit de 0,5 el próximo año, sin contar el servicio de la deuda.
El gobierno dijo que los bancos recibirán nueva infusión de fondos para fin de año.
Al acuerdo se oponen muchos en el partido izquierdista de gobierno Syriza, que consideran que es contrario a las promesas del gobierno que asumió en enero.
El legislador Costas Lapavitsas, de Syriza, dijo que votará en contra del nuevo acuerdo. “Los gobiernos de izquierda deben tomar acciones de izquierda”, afirmó a la televisora privada Mega.
Grecia ha dependido de rescates internacionales por un total de 240.000 millones de euros (263.000 millones de dólares) desde que no pudo tomar préstamos en los mercados de bonos en 2010. Para conseguir los préstamos, gobiernos sucesivos han tenido que aplicar una serie de cortes de gastos, aumentos de impuestos y reformas.
Las medidas agravaron una profunda recesión económica y catapultaron el desempleo a niveles récord.
Fuente: AP