Federico Figueroa, hermano del fallecido cantautor Joan Sebastian, rechazó tener vínculos con el crimen organizado y acusó al gobernador de Morelos, Graco Ramírez, de orquestar una campaña en su contra.
Figueroa mencionó que hace once años Ramírez fue el responsable de ordenar colocar mantas en los que lo acusaba a él y a su hermano de tener relaciones con el narcotráfico.
Después de la difusión de dichas mantas, Figueroa aseguró que encaró al perredista en un restaurante y le reclamó: “Yo lo invito a que si usted quiere tumbar a un gobernador o a un político, no acuse a gente que no tenemos nada que ver ni en la política ni en sus problemas personales, a lo cual él se hizo para atrás y me dijo que no era cierto, que me pedía una disculpa si me había ofendido. Le dije que era un cobarde y un mentiroso. Se le quedó muy grabado al señor, tiene conmigo una riña personal, no se le ha podido olvidar”.
Desde ayer y hoy por la mañana, Figueroa ha concedido entrevistas a espacios radiofónicos para responder a las acusaciones del gobierno de Morelos que lo vinculan con el grupo criminal Guerreros Unidos y como responsable de estar detrás de Cuauhtémoc Blanco, edil de Cuernavaca.
“Para empezar, no le voy al América, yo le voy a las Chivas, lo admiro como deportista mexicano, le admiro su valor como presidente municipal y en ningún momento me he sentado con él y la única relación que yo tendría con las autoridades de Cuernavaca sería sobre un palenque en donde las gradas y las sillas me pertenecen, yo soy el dueño del palenque de Cuernavaca”, argumentó Figueroa.
El 23 de mayo de 2014, la Fiscalía de Morelos citó a comparecer al empresario guerrerense por los constantes señalamientos de sus presuntos nexos con el narcotráfico; Figueroa negó las acusaciones.
Las acusaciones entre Graco Ramírez y Figueroa se agudizaron después del homicidio de la presidenta municipal de Temixco Gisela Mota Ocampo, ocurrido el sábado. El mandatario responsabilizó del asesinato al grupo criminal Guerreros Unidos y aseguró que el hermano del cantante es aliado a esta célula delictiva.
Fuente: Proceso