El Gobierno de Jalisco rinde homenaje luctuoso al exgobernador Aristóteles Sandoval, asesinado la madrugada del pasado jueves en un bar en Puerto Vallarta. Por la mañana se realizó un homenaje de cuerpo presente en el Palacio de Gobierno de Guadalajara y más tarde hubo un acto en la sede del PRI y un tercer homenaje en el Congreso del estado.
El féretro del exgobernador de Jalisco, Jorge Aristóteles Sandoval, fue recibido en Palacio de Gobierno por su sucesor, Enrique Alfaro, en medio de un fuerte dispositivo de seguridad para rendirle homenaje de cuerpo presente.
Enrique Alfaro reveló que quiso escribir un discurso, pero no pudo, por lo que recordó tres momentos que vivió con Aristóteles -a quien define como su adversario político y a la vez su amigo-, los cuales influyeron en el rumbo del estado.
Destacó que hace unas semanas sostuvo una última plática con Aristóteles Sandoval, en la que acordaron que “habría que cerrar filas, porque son muchas las amenazas que tenemos en frente”.
Mencionó que en ese último encuentro “resolvimos lo que teníamos que resolver”, y conversaron de que “estábamos en un momento de que había que cuidar a nuestro estado, no hablamos de alianzas electorales, ni de partidos políticos”.
Enrique Alfaro reiteró su compromiso de castigar a los responsables del homicidio de Aristóteles Sandoval, quien fue asesinado en la madrugada del viernes, cuando se disponía a ingresar a un baño de un bar en Puerto Vallarta. Insistió en que no se va a “doblegar” ni “rendir” ante “los que quieren asumir al estado en el miedo”.
El mandatario jalisciense reconoció que su antecesor fue un líder de su generación y un buen gobernador, que encabezó la transición democrática de Jalisco. Aseveró que siempre lo va a respetar y admirar.
También mencionó que, a finales de 2009, en su calidad de presidentes municipales electos de Tlajomulco y Guadalajara, realizaron un viaje oficial a Estados Unidos junto con otros dos alcaldes, de Tlaquepaque, Miguel Castro, y de Zapopan, Héctor Vielma.
Durante la cena, Alfaro le comentó a Aristóteles que competirían tarde o temprano, por lo que “echaron las últimas copas, previo al agarrón que sabíamos se venía”.
En 2012 intentaron construir un “nuevo acuerdo por el bien de Jalisco”, solo concretaron que, si serían adversarios políticos, habría respeto y “diferenciando los temas personales de los públicos”.
Cuando llegó el féretro a las puertas de Palacio de Gobierno, fue custodiado por elementos de Protección Civil para llevarlo a la planta donde se ubica el antiguo recinto del Congreso local; al sitio solo pudieron ingresar 50 personas. Al momento de entrar el ataúd fue recibido con aplausos.
El primero en tomar la palabra durante el homenaje póstumo fue el exsecretario de Desarrollo e Integración Social durante la administración de Aristóteles Sandoval, Miguel Castro, quien narró la trayectoria estudiantil y política del exmandatario.
Recalcó que buscó combatir el hambre y la pobreza, pero nunca repitió las fórmulas que fallaron tantas veces y desterró la palabra asistencialismo de su vocabulario.
Después, su viuda, Lorena Jassibe Arriaga, con la voz entrecortada mencionó que si su esposo estuviera presente en una situación similar, pediría darle vuelta a la página para pensar en el mañana.
Se montaron varias guardias de honor en las que estuvieron los familiares del exgobernador, así como integrantes de su administración y alcaldes de la zona metropolitana.
También se realizaron tres homenajes de cuerpo presente en el Congreso local, en el ayuntamiento de Guadalajara y en la sede del PRI Jalisco.
Fuente: Apro