Los gobernadores de los estados son los principales ganadores por el atraso en la aprobación de la reforma política, atorada en el Congreso de la Unión por las pugnas partidistas.
Con el retraso, el Instituto Nacional Electoral se verá obligado a ratificar los institutos locales electorales, según Reforma.
“A pesar de que la tardanza en la aprobación de la nueva legislación electoral impacienta hasta al más tranquilo, a los gobernadores los tiene tan campantes y tan contentos”, de acuerdo con el rotativo.
“Si los legisladores mandan la discusión de las leyes secundarias a un extraordinario, los tiempos electorales obligarán a que el INE (Instituto Nacional Electoral), que preside Lorenzo Córdova, no tenga más remedio que ratificar a los consejos locales tal y como están”.
“Es decir, que terminaría por ocurrir justo lo contrario a lo que buscaban los promotores de la reforma política, pues la mayoría de esos consejos fueron conformados al gusto y a las órdenes de los mandatarios estatales”, señala Reforma en su columna Templo Mayor.
“Así que, mientras los legisladores se toman su tiempo, los gobernadores toman sus posiciones con miras a la elección de 2015”, se afirma en el texto.
