De acuerdo con los expertos, el grupo extremista tiene varios métodos para recaudar recursos y sostener sus ambiciones expansionistas: robo de petróleo, tráfico de mercancías, cobro de cuotas, extorsión…
Por Scott Bronstein y Drew Griffin
En el extremo sur de Turquía, las praderas pardas descienden suavemente hacia la frontera con Siria y varios pueblitos como este salpican el paisaje. La tranquilidad que se vive a este lado de la frontera engaña respecto a la escena que se ve al otro lado.
Justo al otro lado de la frontera, en el norte de Siria, el grupo extremista islamista conocido como ISIS libra una batalla total en su esfuerzo por tomar y controlar territorios nuevos, lo que es parte de su intento de establecer un vasto califato islámiso o Estado Islámico independiente, inspirado en el primer califato que se extendió en la región en los siglos que siguieron a la muerte del profeta Mahoma alrededor del año 640 d.C.
Conforme los combatientes de ISIS extienden su control, el Estado Islámico puede ganar dinero para financiar su guerra en la región fronteriza en aldeas justo como Besaslan. Recientemente se descubrieron operaciones de contrabando de millones de barriles de petróleo/.
El petróleo proviene de los pozos y refinerías que ISIS ha tomado en el norte de Iraq y el norte de Siria y hasta hace poco era muy fácil llevarlo de contrabando a esta tranquila parte del sur de Turquía. Una de las razones es que el petróleo contrabandeado es barato y es un bien muy preciado en Turquía: el petróleo allí es tan caro que casi no importa que te lo venda tu enemigo.
En Hatay, Turquía, a media hora de ahí, la gasolina cuesta unos 22 pesos por litro.
La alarma creciente en la comunidad internacional por la expansión de ISIS y las atrocidades cada vez más visibles del gruo (tales como la decapitación de periodistas y trabajadores humanitarios occidentales y los videos que diseminan en internet) provocó que se presionara más a ISIS y a sus métodos de generación de ingresos en las fronteras.
Las fuerzas de coalición, encabezadas por Estados Unidos, atacaron hace una semana y destruyeron muchas de las instalaciones petroleras de ISIS precisamente para cortar el flujo de recursos del grupo.
Sin embargo, el contrabando fronterizo es solo una de las formas en las que ISIS genera dinero.
El Departamento de Tesoro de Estados Unidos reconoce que no cuenta con cifras exactas de la riqueza del grupo, pero cree que ISIS gana millones de dólares al mes.
“Además hay que recordar que su ritmo dequema (cuánto gastan) es enorme, ya que pagan salarios, armas y todo”, señaló un funcionario de la dependencia. “Pero en cuanto a la cantidad que tienen, hay una amplia gama de estimados. Creemos que probablemente ganen alrededor de un millón de dólares (unos 13 millones de pesos) al día”.
Matthew Levitt, director del Programa Stein de contraterrorismo e Inteligencia del Instituto Washington para las Políticas de Medio Oriente, dijo que ISIS “es el grupo mejor financiado que hayamos visto”.
Levitt es un experto internacional en terrorismo y su financiamiento y anteriormente trabajó en los servicios de inteligencia y análisis del Tesoro de Estados Unidos y del FBI.
Levitt dice que ISIS obtiene recursos de forma diferente a los grupos terroristas tradicionales del pasado. Además de los ingresos por el contrabando de petróleo, el grupo recibe dinero a través de donativos de simpatizantes acomodados en países como Qatar y Kuwait.
Además, el grupo tiene otro método de financiación: la delincuencia organizada en los territorios que ha conquistado y que ahora controla. El grupo, dice Levitt, surgió entre los ladrones y matones de un Iraq desmembrado y en su base yace una organización delictiva.
“No debería sorprendernos”, dijo Levitt. “Recuerden que el Estado Islámico llamado ISIS es lo que solía llamarse Estado Islámico de Iraq y Al Qaeda en Iraq; la Red Tawhid; la Red Zarqawi; todos son lo mismo. Ellos siempre obtuvieron sus recursos principalmente de la actividad delictiva local en Iraq”.
Levitt explicó que ISIS opera como un enorme grupo delictivo y que prácticamente no tiene una corporación policiaca que lo controle; en su larga historia ha logrado echar raíces y desarrollarse.
Eso significa que ISIS puede exigir dinero a la gente en donde quiera que haya establecido su dominio. ¿Quieres hacer negocios en territorio controlado por ISIS? Pagas un impuesto. ¿Quieres pasar un camión por una autopista controlada por ISIS? Pagas un peaje. Se cree que los habitantes del territorio de ISIS pagan por casi cualquier cosa.
“Hay reportes de que la gente de Mosul (Iraq) que quiere sacar dinero de su propias cuentas de banco necesitan hacer una donación voluntaria (no tan voluntaria) al Estado Islámico, a ISIS”, dice Levitt. “Controlar el territorio les ha dado oportunidades que otros grupos como al Qaeda no han tenido porque no han controlado un territorio real”.
Es la antigua tradición de la conquista y el control: lo que tomas es lo que tienes. En Mosul, ISIS saqueó el banco central y otros bancos provinciales pequeños, lo que representó un ingreso inesperado de decenas y tal vez cientos de millones de dólares.
ISIS se formó en el vacío que quedó cuando las tropas estadounidenses se retiraron y el Ejército iraquí retrocedió, explica Mouaz Moustafa, director ejecutivo del Grupo de Trabajo para la Emergencia en Siria, con sede en Washington. En la anarquía subsiguiente, ISIS tomó el control, robó bancos, empezó a cobrar y extorsionar a la población y ahora financia su guerra y su expansión por Iraq y Siria casi de forma independiente.
Moustafa cabildea con los legisladores estadounidenses para obtener más apoyo para los rebeldes sirios moderados que ahora luchan contra ISIS y contra el régimen de Bachar al Asad. Recientemente ayudó a reunir en la frontera a varias delegaciones legislativas con los grupos rebeldes moderados.
Dice que los ataques aéreos de la coalición no son suficientes para destruir la mafia autofinanciada en la que ISIS se ha transformado. Es necesario recuperar el territorio y restaurar el orden. “Le cobran impuestos a la gente; esa es una entrada enorme”, dice, refiriéndose a ISIS. “Pero no es solo eso. También controlan los productos básicos de Siria en Raqqa (su capital de facto). Tienen el algodón, el trigo y todas estas cosas. Todos son una especie de fuente económica y energética o de financiamiento para ISIS”.
Los combatientes que están dispuestos a lucha contra ISIS están frustrados porque Estados Unidos no les ha ayudado más, dice Moustafa, quien señala que esa es una decisión que corresponde en gran medida al presidente de Estados Unidos.
“Es decisión de la Casa Blanca”, dijo Moustafa. “Siempre lo ha sido. Creo que la Casa Blanca se está moviendo en la dirección correcta poco a poco. Puedo decir que la política que la Casa Blanca sigue ahora… si la hubieran tenido hace tres años, no habría habido ISIS y probablemente nos habríamos librado del régimen de al Asad.
El gobierno de Obama ha recibido críticas anteriormente y responde que el presidente ha estado evaluando su respuesta a la situación de Siria. “No es difícil ver o imaginar un escenario en el que si Estados Unidos hubiera puesto… arrojado un montón de armas en ese país hace tres años, los miembros de ISIL o algún otro grupo extremista estarían blandiendo armas estadounidenses en su campaña de violencia en la región”, dijo en septiembre Josh Earnest, secretario de Prensa de la Casa Blanca, quien se refirió a ISIS con otro de sus acrónimos. “Así que el presidente ha actuado con mucha deliberación en este caso”.
Los ataques aéreos de la coalición empezaron a atacar puntos de ISIS: atacaron instalaciones petroleras controladas por ISIS e incluso silos. Pero mientras ISIS controle un territorio en el que imponga cuotas, extorsione y robe a los habitantes —de acuerdo con los expertos— ISIS seguirá siendo autofinanciable.
Fuente: CNN