Un tácito pacto de no agresión entre Francia y Dinamarca generó el martes el primer empate sin goles de la Copa del Mundo y un coro de abucheos del público ruso.
Tanto Francia como Dinamarca se citaron en el estadio Luzhniki de Moscú sin mayor urgencia y ofrecieron una anodina exhibición, tal vez el partido más flojo de toda la primera fase de Rusia 2018
El 0-0 certificó que Francia, clasificada a los octavos de final de antemano, quedara como primera del Grupo C y que Dinamarca avanzara como segunda.
La igualdad determinaba ese orden de posiciones, pese a que la victoria de Perú por 2-0 ante Australia en un partido jugado a la misma hora en Sochi confirmaba el pase de los daneses incluso con una derrota.
Los franceses se tomaron el compromiso para dosificar fuerzas con miras a la siguiente etapa. El técnico Didier Deschamps dio descanso a seis titulares y Les Bleus casi no inquietaron al arquero danés Kasper Schmeichel hasta que el suplente Nabil Fekir probó con un par de remates lejanos.
Gran parte de la concurrencia de 78.011 aficionados en el Luzhniki, escenario el proximo 15 de julio, se la pasó abucheando un recital de pases imprecisos y juego a media máquina. Dinamarca se conformó con defender su punto, obviamente al tanto que Australia perdía.
La estadística reflejará lo siguiente: Francia y Dinamarca avanzaron invictos.
En octavos, Francia se topará con el segundo del Grupo D, que saldría entre Argentina, Nigeria e Islandia. Esa llave se definía más tarde.