Al reconocer que algunos centros educativos del país no son propicios para la formación de niños por la violencia, la Secretaría de Educación Pública (SEP) y el Sistema Nacional para el Desarrollo Integral de la Familia (DIF) firmaron un convenio de colaboración para desarraigar el bullying en las escuelas.
El acuerdo signado por sus titulares, Emilio Chuayffet, y Laura Vargas, respectivamente, tiene como objetivo central el bienestar de los menores en los colegios.
El encargado de la política educativa del país detalló los seis ejes de acción: intercambio de información, asesoría recíproca en materia de convivencia escolar, formación y capacitación de personal; desarrollo de investigación, conformación de redes interinstitucionales de los tres niveles de gobierno y la elaboración de los protocolos de atención.
“Este convenio impulsa la sinergia y el trabajo que dentro de las escuelas realizan los maestros y directivos, y los padres de familia en sus hogares. Si desde la escuela y la familia se trabaja para fomentar el buen trato y la confianza es indudable que se alcanzarán importantes logros hacia el pleno respeto de los derechos humanos”, refirió.
Chuayffet aseguró que el documento firmado es un paso más en el conjunto de acciones que está realizando el gobierno del presidente, Enrique Peña Nieto, para llevar a cabo una educación de calidad y equidad paras todos los niños del país.
“Confío en que el paso que hoy damos tenga importantes avances. Celebro la colaboración institucional, especialmente del DIF y estoy seguro de que actuando juntos podemos hacer realidad el deseo del Presidente de poner el bienestar de la infancia como nuestro principal estandarte de gobierno”, aseveró.
La titular del DIF nacional, Laura Vargas, afirmó que el convenio servirá para consolidar una vida plena para niños y adolescentes en los centros escolares, donde se privilegie el trabajo y el respeto.
Señaló que es necesario fortalecer los vínculos familiares que brinden protección y contención social en la vida cotidiana de los estudiantes.
Vargas comentó que para erradicar la violencia de las escuelas, desde febrero, elaboró un plan de trabajo junto con el Instituto de Investigaciones Jurídicas de la UNAM, a fin de elevar la calidad y paz de la educación nacional.
La subsecretaria de Educación Básica, Alba Martínez, refirió que el principal propósito de su área que sus egresados “hayan aprendido a aprender y aprendido a convivir”.
Para ello, dijo, es necesario que en las escuelas se reconstruya y fortalezca el pacto entre maestros y familias para proteger, cuidar y educar a los niños y adolescentes.
“Reconstruir en cada plantel la alianza entre escuelas y familias debe ser una prioridad. Especialmente, cuando es evidente que en algunos centros educativos el clima escolar no siempre es propicio para la formación de los educandos, y que ello tiene que ver, en parte importante, con el desgaste de las familias más desprotegida, de las cuales provienen mayoritariamente los estudiantes de las escuela pública”,
