John Kerry y el senador McCain la citaban frecuentemente como una fuente que acreditaba la intervención de Estados Unidos en Siria, pero resultó que ella misma estaba ligada a los rebeldes de Siria y los corresponsales de guerra en Medio Oriente creen que ni siquiera ha pisado el territorio sirio
Elizabeth O’Bagy, la experta en el conflicto sirio, ha sido despedida de su trabajo en el Instituto Estadounidense de Investigaciones de la Guerra(ISW) por fraude. O’Bagy, de 26 años, ganó notoriedad tras comentar el conflicto sirio en las cadenas de televisión norteamericanaCNN y Fox News, presentandose como especialista sobre el tema.
La supuesta especialista aumentó su reconocimiento, cuando el senador republicanoJohn McCain y el secretario de Estado, John Kerry, comentaran la enorme experiencia de O’Bagy sobre el conflicto sirio, durante una reunión de la Comisión de Relaciones Exteriores del Senado que en ese entonces autorizó el ataque contra Siria.
Según el diario ‘The Huffington Post’, el pasado miércoles el ISW despidió a O’Bagy al enterarse de la experta se presentaba como doctora, algo que en realidad no lo era.
El informe presentado por O’Bagy citado en el Senado de Estados Unidos decía que : “Contrariamente a las declaraciones de numerosos medios de comunicación, no son exclusivamente, ni predominantemente, los islamistas peligrosos y terroristas suicidas de Al Qaeda los que hacen la guerra en Siria”.
Una corresponsal del conflicto sirio, Janine Di Giovanni, comentó al diario que, lo más probable es que la presunta experta jamás haya estado en territorio sirio.
“Nosotros, los reporteros e investigadores que trabajamos en Siria, somos un grupo muy pequeño de personas. Siempre nos protegemos unos a otros. Es un trabajo muy dificil y una guerra muy dificil para trabajar dentro de ella. Mucha gente quedó alucinada cuando la llamada experta en Siria, de quien ninguno de nosotros jamás había oído, de repente apareció en la CNN y otras cadenas”, añadió Di Giovanni.
En 1990 durante la Guerra del Golfo Pérsico, una niña llamada Nariyah, contó que en un hospital de Kwait soldados iraquíes agarraron las incubadoras y dejaron a los niños muriendo en el suelo frío. Todo esto fue transmitido por las principales cadenas de televisión y vistas por al menos 35 millones de estadounidenses. Siete senadores la citaron para apoyar la invasión de Irak. George W Bush, presidente de EE UU en aquel entonces, mencionó la historia varias veces durante las siguientes semanas. Después se descubrió que la niña era la hija del embajador kwaití en Estados Unidos.
Con información de Actualidad RT