La red de “moches” a cambio de asignaciones presupuestales fue evidenciada por el panista Ismael Pérez Ordaz, alcalde de Celaya, Guanajuato, publica Reforma. Lo hizo el pasado 4 de noviembre, abiertamente, ante integrantes del Cabildo, pertenecientes a distintos partidos.
En el audio de la reunión, en poder de Reforma, Pérez Ordaz refiere que en diciembre de 2012 acordó con legisladores del blanquiazul recibir una partida presupuestal de 160 millones de pesos para 2013, a cambio de una comisión de 35 por ciento y la contratación de determinada constructora.
“De acuerdo con fuentes panistas, esta empresa está vinculada con el grupo político de Luis Alberto Villarreal, líder de los diputados federales de Acción Nacional”, según el rotativo.
En el audio, Pérez Ordaz explica que, a cambio de recursos para obra pública, le exigieron que ésta fuera asignada a una constructora que definirían los líderes albiazules en el Congreso.
“Ustedes se dieron cuenta que para la parte de obra pública llegó una aportación de 160 millones de pesos para pavimentaciones.
“Estos recursos llegaron promocionados por las fuerzas políticas, de los diputados (del PAN), hay una cúpula, ellos nos las patrocinaron, con la consigna de que se los diéramos a una constructora que ellos nos iban a asignar y que la obra estuviera inflada un 35 por ciento para que pudiera ser solventado este asunto”, explicó el alcalde.
Según Reforma, en los meses siguientes, Pérez Ordaz negoció con los legisladores panistas que las obras a realizar con esos recursos fueran asignadas a constructoras locales y que la comisión se redujera a 20 por ciento, lo que implicaría el pago de unos 30 millones de pesos, monto que sería pagado por su administración.
“Yo lo que no quise hacer fue malear a cada uno de los constructores que iban a hacer las obras y que ellos por abajo del agua entregaran ese recurso, porque entonces todo mundo iba a pensar que la administración era la que estaba haciendo las cosas mal.
“Casi todos los municipios lo que hicieron fue seguir el consejo que les habían dado las personas, el tomar la obra, el dársela a una constructora y el no complicarse mucho la existencia con mucho trabajo en muchas partes, sino hicieron una calle principal, hicieron una avenida, para que pudiera ser un solo contrato”, expuso.
“Tras recibir en octubre la partida asignada del Presupuesto para 2013, las presiones para el pago de la comisión no se hicieron esperar”, detalla Reforma.
Ante ello, Pérez Ordaz pidió al Cabildo que le autorizara modificar las partidas presupuestales, para poder concretarlo a través de una empresa de gestoría que le indicaron los legisladores panistas.
“Yo necesitaba, necesito planteárselos a ustedes y que ustedes o me autoricen o no me autoricen a hacer este asunto.
“Mi pretensión, si ustedes están de acuerdo, es que hoy podamos subir el cambio de partidas.
“(El recurso) está presupuestado prácticamente desde el presupuesto de principio de año, porque sí venía el compromiso, pero yo ya necesito tomar una determinación, porque las presiones que estoy recibiendo son fuertes, todos los días, a este tema”, planteó.
“Para convencer a los miembros del Cabildo, el Alcalde de Celaya les advirtió que de negarse a pagar la comisión acordada por los recursos asignados podrían verse perjudicados en los próximos presupuestos”, según Reforma.
“Es la única reflexión que yo hago, no tanto por la parte del recurso sino por la parte del futuro y quizás el no decir, bueno, pues somos limpios y puros en el tema, pero pensemos un poquito más hacia lo que puede venirse a dar más adelante”.
El alcalde entregó a los integrantes del Cabildo un contrato entre el Municipio y Urichape en el que la empresa se comprometía a gestionar recursos a cambio del 20 por ciento de los fondos obtenidos.
El contrato buscaba firmarse los primeros días de noviembre y estaría vigente hasta el 31 de diciembre.
Sin embargo, fue frenado debido a que Reforma evidenció en esos días una red de moches en la que estaría involucrado un grupo de legisladores encabezados por Villarreal.