Representantes del izquierdista Luiz Inácio Lula da Silva y del ultraderechista Jair Bolsonaro se preparan este jueves para iniciar la transición del poder en Brasil, mientras las protestas de bolsonaristas contra la derrota de su líder perdían intensidad.
Los cierres de rutas, que llegaron a sumar el martes más de 250 en todo el país, perdían fuerza luego de que Bolsonaro, quien no ha reconocido abiertamente su revés electoral, pidiera a sus seguidores que pusieran fin a sus acciones, aunque respaldó las protestas en otros lugares.
“Quiero hacerles un llamamiento: desbloqueen las carreteras (…) Otras manifestaciones que se están realizando en todo Brasil son parte del juego democrático. Siéntanse a gusto”, dijo en un video colgado en su cuenta de Twitter el miércoles.
En total, había este jueves 73 bloqueos parciales o totales en siete de los 27 estados de Brasil, según el reporte de la Policía de Carreteras (PFR), que dio cuenta de 876 manifestaciones dispersadas.
El vicepresidente de Lula, el centrista Geraldo Alckmin, se reunirá en la tarde con el jefe de gabinete del presidente saliente, Ciro Nogueira, en la capital, Brasilia, indicaron fuentes de ambos equipos a la AFP.
En el encuentro también participarán la presidenta del Partido de los Trabajadores (PT), Gleisi Hoffmann, y el coordinador del programa de gobierno de Lula, Aloizio Mercadante, de acuerdo con CNN Brasil.
Alckmin, ex gobernador de Sao Paulo, es el encargado de coordinar la transición con la administración saliente, con la cual ya ha mantenido contactos en medio de la incertidumbre que provocó el silencio de dos días de Bolsonaro tras su estrecha derrota en el balotaje presidencial del domingo.
Previamente, asistió a una reunión en el Senado con el objetivo de comenzar un proceso para introducir cambios en el presupuesto de 2023 y cumplir las promesas de campaña de Lula en el campo social desde que asuma el poder, el 1 de enero.
“Se necesita un aumento para garantizar los servicios (públicos), las obras y al mismo tiempo la cuestión de Bolsa Familia de 600 reales (110 dólares)”, dijo Alckmin sobre el programa estrella de los anteriores gobiernos de Lula (2003-2010) y que Bolsonaro rebautizó como Auxilio Brasil.
Fuente: AFP