Puerto Rico evitó el martes un incumplimiento de pago de varios millones de dólares al anunciar en el último minuto un pago de bonos, pero advirtió que una agudizada crisis financiera ha obligado al gobierno a desviar dinero que habría de usarse para pagos futuros de deuda a fin de evitar una paralización de servicios básicos.
El anuncio del Banco Gubernamental de Fomento para Puerto Rico se hizo mientras el gobernador Alejandro García Padilla testificaba en una audiencia ante la Comisión de Asuntos Jurídicos del Senado de Estados Unidos que la isla estaba enfrentando una crisis de liquidez.
“Seamos claros: Ya no nos queda efectivo”, señaló. “Éste es un llamado de socorro de un barco de 3,5 millones de ciudadanos estadounidenses que ha estado perdido en el mar”.
García firmó una orden ejecutiva que permite al Departamento del Tesoro de la isla retener ciertos ingresos de varias agencias púbicas para pagar la deuda pública de 72.000 millones de dólares y garantizar la continuidad de los servicios esenciales, incluyendo salud, educación y seguridad pública. Funcionarios dijeron que se espera que se desvíen hasta 329 millones de dólares hasta junio para pagar la deuda.
Melba Acosta, presidenta del Banco de Fomento, dijo que la mayoría de las agencias cuyo ingreso está siendo desviado seguirán teniendo fondos suficientes para cubrir otros pagos próximos de deuda. Entre las agencias afectadas están la muy endeudada Autoridad de Carreteras y Transportación, la Autoridad para el Financiamiento de la Infraestructura y la Autoridad Metropolitana de Autobuses.
“Esperamos que hoy sirva como una clara indicación de que tenemos la intención de cumplir con nuestras obligaciones en la medida de lo posible sin interrumpir servicios públicos esenciales”, señaló Acosta. Sin embargo, la posición fiscal general de Puerto Rico “sigue siendo débil”.
Acosta dijo que las autoridades se seguirán reuniendo con acreedores para hablar sobre restructurar una porción de los 72.000 millones de deuda pública de la isla que el gobernador dice que es impagable.
César Miranda, secretario de Justicia de Puerto Rico, admitió que algunos podrían ver la medida de Puerto Rico como un incumplimiento de pagos técnico, ya que el gobierno está desviando dinero programado para futuros pagos de bonos.
En la audiencia del martes en la comisión del Senado de Estados Unidos, algunos senadores advirtieron que Puerto Rico necesita tomar medidas concretas para organizar sus finanzas.
“Las volteretas y acrobacias financieras deben terminar”, dijo el senador demócrata Richard Blumenthal.
El gobierno de García está buscando acceso al Capítulo 9 de la ley de bancarrotas mientras la isla batalla para salir de casi una década de recesión. Víctor Suárez, secretario de Estado de Puerto Rico, dijo que la isla se está quedando sin opciones para generar dinero y cumplir los pagos de su deuda si el Congreso de Estados Unidos no permite acceso al proceso de bancarrota con protección.
“Si caemos en incumplimiento de pagos, habría consecuencias catastróficas”, agregó.
El gobierno de Barack Obama propuso un plan para ayudar la isla, pero los republicanos en el Congreso dijeron que quieren atacar primero las causas de la crisis y ver más datos sobre el estado financiero de Puerto Rico.
“Extender meramente la autoridad para reestructurar la deuda, sin las herramientas para atacar las causas fundamentales del problema fiscal, no es una solución a largo plazo que ayude a Puerto Rico”, afirmó el titular de la Comisión de Asuntos Jurídicos, el republicano Charles Grassley.
Fuente: AP