Un atentado contra la población civil, alcaldes vinculados con el crimen organizado, exgobernadores con hermanos prófugos y una desaparición de poderes de facto han marcado la historia política de Michoacán, un estado en el que el gobierno federal aspira a borrar el tripartidismo a través de una estrategia que contempla desde desarrollo de infraestructura hasta bailes populares, publica El Financiero.
“Aquí han gobernado PRI y PRD. Pero en la elección de 2011, el PANse quedó a tres puntos de lograrlo. Fue con Felipe Calderón cuando el narco y su vinculación con la política comenzó a ser tema”, según el rotativo.
Es en la zona de Tierra Caliente donde las actividades del narcotráfico se concentran, aunque en los últimos años se han extendido.
La relación de alcaldes con Los Caballeros Templarios quedó de manifiesto en 2014, cuando el gobierno federal detuvo a seis ediles (entre ellos los de Aguililla, Pátzcuaro y Apatzingán).
“En 2009, el gobierno calderonista ya había intentado probar la relación, cuando ordenó la detención de ediles, jefes de la policía y de seguridad pública, bajo el argumento de que tenían nexos con el crimen. El caso no prosperó y casi todos los detenidos fueron puestos en libertad por falta de pruebas”, de acuerdo con el texto de la periodista Nayeli Cortés.
Pero la violencia no se alejó. En 2008, un atentado con granadas en el centro de Morelia, justo cuando el gobernador perredista Leonel Godoy encabezaba la ceremonia del Grito volvió a colocar a la entidad como uno de los focos rojos en materia de seguridad.
“Dos años después, un hermano de ese exgobernador, Julio César Godoy, entró a la Cámara de Diputados escondido en una camioneta y rindió protesta para tener fuero y protegerse de las acusaciones que lo ligaban con el crimen organizado. Hoy está prófugo”, según el reporaje.
En 2013, el gobierno federal nombró a Alfredo Castillo como comisionado de seguridad en la entidad, a raíz de que grupos de autodefensas comenzaron a surgir, en teoría, para defenderse y defender a su comunidad de las extorsiones que cometía el crimen organizado.
“Como parte del operativo que se implementó en el estado, el gobierno federal descubrió indicios de que Jesús Reyna, entonces secretario de Gobierno local, tenía vínculos con Los Caballeros Templarios“, se recuerda.
La situación provocó que panistas y perredistas pidieran al Senado declarar la desaparición de poderes. “En Michoacán hace rato que no hay poderes para poder garantizarle a los ciudadanos libertad, seguridad, tránsito y que esto hay que reconocerlo…”, indicó el presidente del PAN, Gustavo Madero.
Para la elección de gobernador, el PRI postuló a Ascención Orihuela Bárcenas, exalcalde de Zitácuaro; el PAN a Luisa María Calderón Hinojosa; y, el PRD, a Silvano Aureoles.