Un programa del Pentágono para analizar avistamientos de Objetos Voladores No Identificados (Ovni) en Estados Unidos fue financiado hasta por 22 millones de dólares anuales.
Durante años, el programa de Amenazas Aeroespaciales Avanzadas investigó avistamientos de objetos voladores no identificados, según funcionarios del Departamento de Defensa y registros de participantes del programa obtenidos por el diario The New York Times.
Nunca antes el Departamento de Defensa -con un presupuesto anual de 600 mil millones de dólares- había reconocido la existencia del programa, el cual dice haber concluido en el 2012.
Sin embargo, los partidarios del programa afirman que sigue existiendo, incluso afirman que en los últimos cinco años los funcionarios del programa investigan los materiales que les presentan los miembros del departamento.
El programa fue financiado en parte por el pedido de Harry Reid, demócrata de Nevada, quien fue líder de la mayoría del Senado y que desde hace tiempo tiene interés en los fenómenos espaciales.
Destaca que el proyecto -iniciado en 2007- mantiene archivos con estatus de clasificado.
La mayor parte los fondos del ahora financian una investigación aeroespacial dirigida por un empresario multimillonario y amigo de Reid, Robert Bigelow, quien actualmente trabaja en la NASA en un programa para producir naves expandibles para que los humanos las utilicen en el espacio.
En mayo, Bigelow aseguró en el programa 60 minutos, de la cadena CBS, estar convencido de la existencia de Ovnis visitando el planeta.
En respuesta a los cuestionamientos del diario, el Pentágono reconoció este mes la existencia del programa, que comenzó como parte de la Agencia Central de Inteligencia (CIA) pero insistieron en que el esfuerzo terminó tras cinco años, en 2012.
“Se determinó que había otras cuestiones de mayor prioridad que merecían financiación, y el mejor interés del Departamento de defensa era realizar un cambio”, dijo un portavoz del Pentágono, Thomas Crosson, a través de un correo electrónico.
Estados Unidos ha sido un asiduo investigador de los Ovnis, durante décadas.
En 1947, la fuerza Aérea comenzó una serie de estudios donde recopilaron más de 12 mil casos, hasta su finalización en 1969.
El proyecto, que incluyó el estudio llamado Project Blue Book, comenzó en 1952 y concluía que la mayoría de los avistamientos involucraban estrellas, nubes, aviones convencionales o aviones espía.