El sacerdote católico exige destituir al presidente municipal de Apatzingán por sus presuntas ligas con narcos y la protección que brinda al crimen organizado
El vicario de la Diócesis de Apatzingán, Gregorio López, acusó al Alcalde de ese municipio, Uriel Chávez, de encubrir desde de su puesto a miembros de la delincuencia organizada. Además dijo que su jefe de seguridad supuestamente era el encargado de las desapariciones y de los secuestros de varios ciudadanos.
El sacerdote consideró que el Edil debe separarse de su cargo y que el Congreso del Estado debe pronunciarse a favor de una Presidente Municipal interino. Incluso reveló que él tiene en su poder supuestos sondeos de opinión en los que el 90 por ciento de los consultados rechaza la permanencia del alcalde de Apatzingán por sus presuntas complicidades con grupos delincuenciales.
“Es una real vinculación, desde la campaña, desde sus nexos. Hay testimonios fehacientes de sus reuniones, de sus pactos, de sus órdenes, de sus ataques; impunidad ante un secuestro, ante una muerte”, dijo el religioso a reporteros.
Y agregó: ”Su jefe de seguridad era el que levantaba; él sabía, él ordenaba a quién se levantaba”. Gregorio López dijo que hará llegar por escrito esta petición al Congreso federal, apoyado por los civiles armados.
Asimismo, anunció la conformación de un consejo ciudadano que se encargará de revisar la procedencia de miembros de los grupos de autodefensa.
Precisó que dicho órgano estará conformado por un centenar de prominentes empresarios y miembros de la sociedad civil de Apatzingán quienes permanecerán en el anonimato por seguridad.
Gregorio López ha realizado sfuertes eñalamientos y críticas contra las autoridades pues, de acuerdo con el párroco de Apatzingán, éstas protegen a los líderes del cártel de Los Caballeros Templarios.
El sacerdote reveló en días pasados que Nazario Moreno, “El Chayo”, y Servando Gómez Martínez, “La Tuta”, los máximos líderes de Los Caballeros Templarios, comieron el miércoles de la semana pasada en un rancho llamado “La Cucha”, muy cerca de Apatzingán, y justo el día en que llegó el grueso de las fuerzas federales a Tierra Caliente.
“Nazario Moreno ayer comió con ‘La Tuta’ [Servando Gómez Martínez] en un rancho que se llama ‘La Cucha’, aquí a unos kilómetros de Apatzingán, y el gobierno lo sabía. Pero había que enfocar, focalizar la mirada en Fausto Vallejo [Gobernador de Michoacán], ese decrépito que vino a visitarnos cuando los jefes más nocivos de la reunión estaban reunidos allá, tal vez hasta con seguridad del gobierno mismo, de la XXI Zona Militar, que recibe nómina de Los Templarios”, dijo en una entrevista con Red Noticiero.
Fuente: Sin Embargo
