Un equipo pericial “muy especializado” trabaja en varias líneas de investigación para resolver el homicidio, asegura el fiscal de Guerrero
El sacerdote Gregorio Gorostieta López, secuestrado y cuyo cadáver apareció en la carretera Iguala-Ciudad Altamirano, Guerrero, murió por asfixia y no por disparo de arma de fuego, aseguró el fiscal del estado Miguel Ángel Godínez.
El padre López Gorostieta no murió por un tiro de arma, murió por asfixia”, precisó el funcionario estatal, en entrevista radiofónica.
El jueves pasado fue encontrado muerto el padre “Goyo”, como era conocido, luego de que horas antes el obispo de Ciudad Altamirano, Maximino Martínez Miranda, denunció su desaparición. En un primer momento se señaló que el cuerpo del presbítero tenía un tiro en la cabeza.
El cadáver apareció en el municipio de Tlapehuala, donde fue sacado delseminario y secuestrado por un comando el día 22.
El fiscal de Guerrero indicó que después de practicar la necropsia de ley al cuerpo del sacerdote reveló que la causa de muerte fue asfixia.
Añadió que hay varias líneas de investigación sobre el homicidio, en el que está trabajando un equipo pericial “muy especializado”.
Fuente: Excélsior
Información relacionada:
Condena papa Francisco ejecución de cura
http://hilodirecto.com.mx/condena-francisco-ejecucion-de-cura/
