Édgar, alias El Ponchis, saldrá el 3 de diciembre del Centro de Ejecución de Medidas Privativas de la Libertad para Adolescentes, esté o no listo para ser reinsertado porque ese día concluye su medida sancionadora, dijo la presidenta del Tribunal Unitario de Justicia para Adolescentes de Morelos, Ana Virinia Pérez Güemes y Ocampo.
El menor de edad fue detenido en diciembre de 2010 por elementos de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), en el aeropuerto del estado de Morelos, acusado de formar parte del cártel del Pacífico Sur y ser presunto responsable de varios crímenes en esa entidad.
El día de su detención, Édgar, conocido como El niño sicario o El Ponchis,aceptó ante los medios de comunicación haber ejecutado a cuatro víctimas del cártel del Pacífico Sur bajo los influjos de las drogas y recibir un pago de dos mil 500 pesos semanales por sus actividades en el grupo delincuencial. El menor fue sentenciado a tres años de prisión por homicidio y por delitos federales.
“Hemos hecho todo lo que se ha podido con él, sin embargo, él tiene que concluir ya el 3 de diciembre es el límite para que concluya su medida sancionadora, esté reinserto o no, él tiene que salir, ¿por qué?, porque también el Tribunal, el juez, la juez de ejecución, debe de cumplir con este principio de legalidad, y comento esto porque leí alguna nota que se va a analizar si él está de alguna manera preparado pasa salir, y esto no es así, la sentencia le impuso a Edgar tres años de privación legal de la libertad”, dijo la presidenta del Tribunal Unitario de Justicia para Adolescentes de Morelos.
Durante este tiempo se han esforzado por darle terapia psicológica al menor a través de un psicólogo privado especialmente para él y con la psicóloga del propio TUJA, sin embargo, reconoció que el trabajo requiere de más tiempo.
“Édgar ha tenido a su disposición a dos terapeutas, uno contratado de manera particular por el Tribunal y la propia psicóloga del Tribunal, ¿por qué?, porque él era renuente a las terapias grupales e individuales que le ofrecía el CEMPLA y es lógico porque los psicólogos del CEMPLA están continuamente en contacto directo con ellos, tienen relación con todos los jóvenes del CEMPLA, y a veces eso impide que ellos tienen confianza con el personal que está trabajando todos los días ahí, me parece que obtuvimos resultados favorables con este trabajo terapéutico que hicieron con él, sin embargo, quienes han estado en terapia saben que esto se lleva muchísimos años, trabajar la historia personal, es un trabajo que implica muchos años de trabajo, lo que no se va a poder con Edgar”, indicó.
Reiteró que durante los tres años que duró el internamiento de Edgar, también conocido como “El niño sicario”, se esforzaron en trabajar con él, sin embargo, dijo que esté o no reinserto, tiene que salir para preservar el principio de legalidad.
“Durante estos tres años trabajamos lo más que se pudo con él, haya rehabilitación o no, él tiene que salir porque es el respeto al principio de legalidad, no podemos ampliar esa sanción”, aseveró.
Aunque el futuro del menor a partir del 3 de diciembre ya no dependerá del TUJA, ni de las autoridades de reinserción social, agregó que a la par trabajaron con la familia y la tutora del menor, quienes se encargarán del joven y quienes decidirán sobre Edgar.
“¿Qué va a pasar?, estamos trabajando con su familia también en la cuestión terapéutica, estamos trabajando con su tutora, y la decisión de lo que vaya a pasar, únicamente depende de la familia, el Tribunal ya no tiene atribuciones ni facultades para poder decidir que va a pasar con él , así es que el trabajo post internamiento, dependerá de la voluntad del joven y de la familia, y ahí si nosotros no tendríamos nada que opinar, ni nada que dar a conocer porque él ya ha terminado su sanción, deja de estar en proceso judicial”, explicó.
“El Ponchis” fue detenido en diciembre de 2010 en el aeropuerto Internacional de Cuernavaca, cuando intentaba abandonar Morelos junto a dos hermanas apodadas “Las Chabelas”. El menor aceptó ser parte del cártel del Pacífico Sur (CPS) y haber torturado y asesinado a cuatro personas, por lo que fue procesado y condenado a tres años de prisión preventiva en el CEMPLA, de donde saldrá el 3 de diciembre.
Fuente: Excélsior
