Los países de Oceanía y el este de Asia han sido los primeros en recibir el Año Nuevo. La bahía de Sydney pintó el cielo de luces y de color para saludar a 2014 bajo la atenta mirada de cientos de miles de espectadores. Por primera vez en más de una década, se dispararon fuegos artificiales desde el techo de la Casa de la Ópera, uno de los monumentos más emblemático del país.
En China, donde precisamente se inventaron los fuegos artificiales, tampoco han faltado los espectáculos pirotécnicos. Destacan los festejos que han tenido lugar en la popolusa ciudad costera de Shanghai y en la Gran muralla. En la contaminada ciudad de Wuan las celebraciones han sido más sencillas, ya que las autoridades prohibieron el lanzamiento de cohetes para evitar un incremento de la polución.
Fuente: euronews
